𝐍𝐎𝐒𝐎𝐓𝐑𝐎𝐒 | ᴅᴜꜱᴋᴡᴏᴏᴅ

21. Ayuda

Abrió sus ojos con lentitud intentando adaptarse a la luz del día. Cuando por fin pudo abrir sus ojos en totalidad intentó levantarse, pero le fue imposible pues un brazo masculino se encontraba enrollado en su cintura...

— Phil, suéltame...—pidió amablemente, pero fue en vano y solo consiguió que la sostuviera con más fuerza

— No te vayas.

— Phil...

— Por favor, no me dejes...

¿Y cómo podía decirle que no? Se veía tan lindo y tranquilo en su compañía que sólo podía quedarse a su lado, además, no es como si ella quisiera alejarse tampoco. Procedió a acomodarse y sin darse cuenta se volvió a quedar dormida.

Cuando se despertó y buscó al chico no lo encontró; un poco asustada se levantó rápidamente y recorrió toda la casa, afortunadamente estaba en la cocina preparando algo.

— ¡Casi me matas del susto! ¿Cómo omo vas a irte así?..—reprochó acercándose a él

— ¿Qué pasa? Sólo me levante ¿por qué tanto miedo?..—preguntó dejando lo que estaba haciendo y acercándose a la silla en la que estaba sentada

— Es que...—se quedó en silencio cuando notó que iba decir lo de la llamada de anoche. Lo pensó por un momento y llegó a la conclusión de que lo mejor sería callar— Después de todo lo que paso quede un asustada, sobre todo si se trata de tí, no quiero que te pase nada...

— Linda, me encanta saber que para tí soy importante, pero tranquila, no va a pasarme nada.—acarició suavemente su mejilla y luego besó su frente— Vas a tener que soportarme por mucho tiempo más.

— Tonto ¿qué estas haciendo?—preguntó con una sonrisa, ya un poco más calmada

— El desayuno.

— Se ve muy bien.—lo vió sonreír y no pudo evitar imitar su acción— No sabía que sabías cocinar

— Hay muchas cosas que aún no sabes de mí, preciosa. Y no es por presumir, pero soy un gran cocinero.—comentó con arrogancia, haciéndola reír

— Ya lo veremos...

Siguieron hablando hasta que el desayuno estuvo listo, llevaron todo hacia la mesa y se sentaron.

— ¿Dormiste bien?—ella soltó una risa, había estado acompañada toda la noche por el chico que la volvía loca, durmió de maravilla

— Claro que sí, dormí muy bien.

— Me alegra oír eso ¿Qué harás más tarde?—habló antes de tomar un sorbo de café

— Tengo mensajes de Jessy, así que lo más probable es que nos reunamos.—levantó sus hombros sabiendo que su amiga la interrogaria apenas la viera

— Seguro quiere saber que paso, creo que estaba hasta incluso más nerviosa que nosotros dos—sonrió al recordar parte de la charla con su hermana

— Yo también lo creo.—ambos rieron y entre una que otra charla terminaron de desayunar.

Levantaron las cosas y Stephanie lo ayudó a lavar y limpiar todo; una vez terminado decidió que ya era hora de irse

— Bueno, tengo que irme, gracias por todo, realmente la pase increíble.

— Gracias a tí. Estoy muy feliz de que al fin hayamos aclarado esto, y además porque ahora sí puedo decir que eres mi novia.—la atrajó hacia sí mismo mientras sonreía

— ¿Piensas contárselo a alguien?

— Si es por mí, le diría al mundo entero que eres mi novia ¿Crees que perdería la oportunidad de decir que tengo una mujer tan preciosa a mi lado? Claro que no.—dijo para después besarla