Amor a primera vista (parmiga)

CAPÍTULO 13

2 AÑOS ATRÁS

-sabía que algo no andaba bien, no comprendo cómo me pudiste hacer esto- soltó un fuerte suspiro, su tono de voz era de alguien decepcionado, destruido, triste -te demostré todo el tiempo que estuvimos juntos que te amaba, te consentía, te daba todo lo que estaba a mi alcance, siempre me preocupe por ti, procuraba todos los días hacerte feliz, era atento, caballeroso. No entiendo en qué fallé- estaba cansado, en sus mejillas se notaba el rastro de lágrimas que minutos atrás derramó, sus ojos estaban rojos y reflejaban tristeza, estaba sentado en la esquina de la que ahora sería nuestra antigua cama, yo por mi parte estaba sentada en la parte de arriba, abrazando mis piernas contra mi pecho, estaba cubierta por una sabana cuya función era tapar mi desnudez, no podía pensar, la mente la tenía en blanco, solo me atenía a escuchar sus palabras, -yo si era feliz contigo, disfrutaba cada momento que pasábamos juntos, mi familia te ama, pero, se que después de que les cuente lo que has hecho no te querrán ver ni en pintura- no apartaba la mirada de la mía haciendo me sentir peor, ni yo comprendía en que momento había pasado todo esto -¿te vas a quedar ahí callada?- aparte mi mirada de la suya por un momento, un nudo en mi garganta se había formado otra vez impidiendo que hablara, trague duro, suspiré y volví a fijar mi vista en él

-yo... en verdad lo siento, no te quise lastimar, no entiendo...- antes de poder seguir me interrumpido

-si en verdad no me querías lastimar hubieras pensado muy bien las cosas antes de abrirte de piernas a cualquiera que se te cruzará en frente y seguir así con cada vez más hombres, llegar a mi lado y fingir felicidad cuando nunca la hubo. Solo quiero que seas sincera con migo, dime en que momento pasó todo esto, por que lo hiciste y no paraste, quiero una razón y no una excusa, saber si podré aunque sea entender, porque perdonarte definitivamente no pasará, y más aún cuando hace unos minutos acabo de sacar a un hombre que no conozco de mi propia cama totalmente desnudo que se encontraba penetrando te sin parar-

sabía que había cometido un gran error, eché a la basura 3 años de noviazgo que había formado con ese ser tan hermoso que el único delito que cometió fue amarme con todo su ser.

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Me adrente en mis pensamientos, tenía que aclarar mi mente antes de dar una respuesta. Supongo que todo inició desde el momento en que había aceptado ser parte de un equipo de fútbol que según yo me ayudaría a formar mi carrera profesional, los primeros meses fueron lo mejor, aprendí mucho, hice amigos e incluso por eso lo conocí a él a Lucas Wheeler, la persona que me ayudó mucho a mejorar en mi estilo de juego, era el capitán del equipo masculino, nos conocimos en un entrenamiento mixto que decidió hacer el entrenador, era una persona encantadora, muy gentil y generosa, con el paso del tiempo llegamos a entablar una buena amistad en la que pronto los sentimientos más allá de querernos como buenos amigos harían lugar cada vez más en nuestros corazones. Los primeros 2 años fueron muy buenos, pero el 3ero fue el detonante. Lucas por su buen rendimiento fue llamado por un equipo de primera división para jugar, mientras que yo por mi parte me mantenía en las inferiores, y aunque estaba feliz por él, no podía evitar sentir celos de su triunfo, trataba de controlar me, pero en ese momento conocí a una persona nueva que me llevó a tocar fondo, me manipulaba mentalmente, me sacaba a fiestas y me enseñaba chicos, estaba al tanto de todo lo que pasaba en mi relación, me quería ver destruida, se hizo pasar como buena amiga, incluso me hizo alejar mucho de gabriela y michael. Como Lucas ahora se encontraba más ocupado apenas y teníamos tiempo para nosotros, me metía en la cabeza que eran excusas para estar con otras, que gracias a estar allá en el fútbol reconocido conoció mejores chicas y me engañaba, logró hacer que creyera más en ella que en mi propio novio, y así fue como consiguió arruinar todo, me incitó a acostar me con otro, al principio dude pero después caí como una ridícula en su juego, me decía que siguiera así, y pues así fue, durante todo un año viví engañando lo pensando que ya no me amaba, me sentía culpable por que nunca me llegue a sentar con él a hablar sobre nuestra relación, pero ya lo hecho estaba.