Amor a primera vista (parmiga)

CAPÍTULO 32

Después de 2 días de haber estado en el hospital recuperando las energías (pues las lesiones se habían curado durante el mes que estuve en coma) por fin estaba fuera recibiendo el aire fresco que ofrecía el otoño casi invierno, y aunque un frío recorrido mi espalda poniéndome la piel de gallina haciendo me temblar un poco, decidí ignorar eso para disfrutar de este momento, en el que después de un mes largo y unas horas en las que estuve prácticamente muerto, volver a ver el cielo en el atardecer, la luna ya más visible y el sol ocultándose tras las montañas era totalmente satisfactorio y más sabiendo que me encontraba con las personas que más amaba.

-¿bueno y ahora?- preguntó Cristian, quien estaba parado al lado de mi madre que a su vez estaba a mi izquierda, y a mi derecha estaba vera aferrada totalmente a mi brazo con nuestras manos entrelazadas sin intenciones de soltarnos.

-yo digo que vayamos a mi casa- propuse esperando una afirmación de todos que no tardó en llegar

-por supuesto- respondió Cristian. (el único que lo hizo verbal mente).

y así sin mas nos dirigimos rumbo al estacionamiento del hospital.

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El viaje de camino a mi casa era totalmente silencioso, nadie quería hablar, solo se escuchaban nuestras respiraciones

-vaya día no?- preguntó Cristian rompiendo el hielo a su vez que miraba por el espejo retrovisor encontrándose con mi mirada

-muy agotador- respondí notando como ni mi mamá ni verá tenían intenciones de hablar, parecía que estaban sumergidas en sus cabezas, cada una sentada a cada lado mío con sus cabezas recostadas en mis hombros. Por supuesto estaba en el medio.

Un silencio incómodo lleno el auto.

-creo que será mejor si enciendo la radio- habló Cristian tratando de relajar el ambiente, lo cual agradecí en mi cabeza.

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20 MINUTOS DESPUÉS

-bueno, y ahora que estamos ya más cómodos, ¿café?- ofreció Cristian rompiendo el silencio

-si, por favor- habló mi madre por primera vez desde que salimos del hospital, al igual que vera

-yo también, gracias-

-de acuerdo, ¿y tu Patrick?- le asentí en respuesta, -muy bien, entonces ya vuelvo- dijo para después desaparecer por completo de la sala

-bueno, es raro volver después de tanto tiempo- hablé con total tranquilidad -¿que pasó el tiempo que no estuve?-

-bueno, Cristian se hizo prácticamente a cargo de la empresa mientras no estabas, estuvo pendiente de todo sin dejar de lado su negocio- habló vera

-es serio?- pregunté sorprendido, tendría que agradecer le de alguna manera por eso

-si, habla en serio- responde Cristian entrando a la sala con 4 tazas de café en una bandeja -aunque tuve ayuda de Gladis y Armand, me hice el "jefe" por el tiempo que no estuviste- camina hasta estar al frente de nosotros para entregarnos las bebidas

-gracias- respondemos los 3 al unísono

-no hay de que- deposita la bandeja en la mesa y se sienta en una silla individual con su taza de café en mano

-vaya cris no se como agradecer te-

-no tienes que, con tus palabras es suficiente, ya sabes, lo volvería a hacer si surge una emergencia y se que tú también lo harías por mí- responde ocultando una sonrisa detrás de la taza mientras bebe de esta