Jonah despertó temprano, había silencio en la casa, su madre estaba de turno, su padre seguramente estaba dormido, al igual que sus hermanos, era domingo y debía tomar un bus para ir al mercado de las flores en columbia a comprar las flores más hermosas que pudiera encontrar. Planeaba cortejar a Daniel ese día.
Después del drama de la semana, donde ambos tuvieron un corte de cabello y acabaron con castigos por cosas completamente diferentes ambos.
¿Por qué estaba el auto de Autumn afuera de su casa?, cierto, le contó su plan, mejor para él, no tendría que pagar pasajes y Autumn le ayudaría. Jonah pensaba que enserio necesitaba ayuda de la omega.
- ¿Café?- le preguntó Autumn tan pronto Jonah subió al auto dándole un vaso de cartón de la cafetería del centro. Jonah negó con unxeño fruncido- Lo sabía, es chocolate tonto-
- Gracias- dijo el alfa mientras tomaba el vaso, dio un sorbo y empezaron el camino.
- ¿Cuál es la flor favorita de Daniel?- Jonah se quedó pensando, tratando de recordar si alguna vez Daniel le había dado ese dato pero nunca había salido a la conversación.
- No tengo idea, ¿tu sabes?- Autumn se quejó, paseaba su mirada entre el camino y Jonah, le soltó un golpe en el brazo al alfa quien se quejo.
- Por dios, ¿cómo que no sabes?, ¿escogerás una flor al azar?-
- Tenemos esta cosa, sabré que flor le gusta al verla, así que no te preocupes por esto Au-
- Estúpidos alfas- murmuró antes de golpear a Jonah otra vez.
Cuando llegaron al mercado, Jonah vio miles de diferentes flores, cada una era diferente y venían en varios colores, que estrés, deseaba que Daniel estu iera ahí para ayudarlo, pero tenía que ser un sorpresa.
Acabó eligiendo una que en un tallo largo tenía muchas florecitas, como un arbustito personal de flores. Tal vez pensó que fue una buena decisión aceptar el dinero que su padre ofreció.
Tenía diez flores llamadas armerias, eran dos ramos, se convenció de que el armaría el ramo con las diez flores, después fueron a comprar un listón, por que Autumn le dijo que no podía ser cualquier listón ya que era el momento más importante de su vida.
Jonah afirmó con eso que Autumn era una dramática exagerada, ya que tendría mejores momentos con Daniel.
Compraron un listón de organza de varios colores, su plan era poner uno y luego otro y otro y otro, eran los colores de las pecas de Daniel. Ignoró por completo el sonido de ternura que hizo Autumn cuando le explicó el por qué esos colores.
Mientras tanto en su casa Daniel estaba cortando solamente las margaritas que consideraba perfectas, quería darle el ramo perfecto a Jonah y eso significaba que fuera un ramo mediano, con flores delicadas pero hermosas, en un papel color lila claro a nada de llegar al blanco y un listón de unos tres centímetros de ancho color blanco.
Había cortado las flores en la mañana, había limpiado los tallos y ahora acomodaba cada flor creando algo perfecto.
- Mira tu, eres muy bonita pero si sigues arruinando el ramo te pondré en un florero solita- le susurró enojado a la flor.
Había hecho brownies antes, tenía dos en una cajita del mismo color del papel que envolvería el ramo y amarrada con el mismo listón.
- Ya sabía yo que podíamos ser amigos- dijo a las flores mientras amarraba el listón, formando un lindo moño.
Puso el ramo en su mochila, solamente para no cargarlo en sus manos, no cerró la mochila por completo, solo para que el ramo no cayera. Se colgó la mochila y tomó la cajita de los brownies, salió de la casa y empezó a caminar al parque donde se había quedado de ver con Jonah ese día.