Capítulo 8: Diez

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—¿Q-qué dices? —retrocedió un poco al sentir que el menor se inclinaba un poco hacia él. Tragó saliva, e intentó calmar aquella tensión que se formó en su persona de sólo haber oído aquellas palabras.

Goku le estaba proponiendo tener sexo, de una manera tan directa que lo tomó totalmente desprevenido. Miró aquellos ojos, serios y fijos en él. Miró sus labios, un poco fruncidos para disimular el temblor en ellos.

—Dije que quiero tener mi primera vez contigo, Saiyan—repitió.

—Pero yo...—sentía de pronto que la tensión en el lugar aumentaba—. Kakarotto...

—Por favor... ¿Lo harías, Saiyan?

Esto...—mordió su labio inferior—. Si no lo hago yo, buscarás a alguien más, ¿no es así?

Esa pequeñita incomodidad entre ambos adolescentes se fue acrecentando ante aquel cuestionamiento. Goku soltó aire antes de abrazar sus piernas.

—No siento confianza de pedirle algo así a otro chico—lo miró—. Pero es muy probable que sí.

—Tsk...—empuñó sus manos y bajó la mirada.

Esa propuesta, inesperada y bastante sorpresiva, dentro de un momento tan delicado... ¿era correcto aceptarla? ¿No era un abuso que dijera que sí? Ni siquiera... Ni siquiera en sus más eróticos sueños podría haber imaginado al Son haciéndole esa petición. Una que no quería cumplir.

Pero, si se negaba, ¿de verdad Goku correría a los brazos del primer imbécil que se le cruzara? ¿El menor se pondría en una situación de riesgo por su baja autoestima, donde podrían aprovecharse de esa vulnerabilidad en la que se encontraba?

No, si lo reconsideraba a Goku no le agradaba la mayoría de los chicos de esa escuela. Es más, muchos se rieron de su situación, por lo que, muy probablemente, no lo haría con nadie. A no ser que...

A no ser que pensara en el imbécil que de vez en cuando iba a la preparatoria por su servicio social. Ese que le había hecho la sugerencia de salir por el simple hecho de que creía que era doncel y se lo quería tirar. El mismo que quizá ya se habría enterado de que Goku era doncel y querría ir tras de él para aprovecharse de su "situación". Ese que Kakarotto consideraba atractivo y, por ende, con él sería más fácil de manipular.

—¿Saiyan? —insistió.

Tenía tiempo, había ganado unas cuantas semanas por esa queja por acoso sexual que hizo en contra de él debido a sus insistencias. Ahora que estaba suspendido, podría relajarse sólo un poco y no preocuparse por que Goku se pusiera en contacto, al menos no frente a frente, con él.

Al final, el Son tenía derecho de hacer lo que quisiera. Pero en ese momento, donde lucía tan afectado por todo, era susceptible a caer en manipulaciones o tomar pésimas decisiones.

Además, ¿podía decir que le molestaba la idea de que lo hiciera con alguien más? Alguien que quizá sólo acceda por el placer, alguien que no le diera al Son el valor que ese chico tan apuesto merecía.

—Tsk, iré a casa. Necesito una ducha—se puso de pie y caminó despacio, ya sin insistir.

—Espera—el menor volteó—. Está bien, lo haré—Goku mordió su labio inferior—. ¿Qué día?

—Viernes. En mi casa.

—Hmph...—soltó aire—. ¿No habrá nadie?

—No. Estaré solo en casa—Vegeta empuñó sus manos—. ¿Lo harás o no?

¿Ni aunque...?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora