Algo nuevo... eso te incluye a ti.

Capítulo 54:

Sábado 14 de octubre – 04:35pm –Ealing, Londres

~Ben~

Si creí que una belieber era suficiente, ahora, dos me parecen demasiado, tanto Lucy como Joe me agotaron la paciencia con el tema del show del canadiense, ambos hicieron cuenta regresiva, cada vez que me encuentro junto a ellos me saturan hablando de lo que esperan del concierto, de que se pondrán, de cuales canciones cantará, cuales dejara afuera de su repertorio, etc. Desde ayer, mi princesa está buscando en su armario algo adecuado para ponerse, se compro ropa nueva que ahora no la convence, Sebastián me dejó solo en la trinchera, desde ayer temprano se fue a lo de su novio.

Anoche la bruja no permitió que nos veamos con Joe, por lo tanto, decidí quedarme con mi princesa, preparé la cena, nos sentamos a comer en el sofá mientras veíamos algo en la televisión, ¿Qué eligió la rubia? Exacto, el documental de Justin. 

Llego la hora de dormir, mis ojos estaban cerrados intentando entrar en un sueño profundo pero mi amada hermanita arruinó el momento, ella no podía dormir, ansiosa, su cabeza era una maquina sin descanso, así que se acostó junto a mí, a hablar, sobre distintas cosas pero lo que más resonaba era Justin, a veces me sorprendo del nivel de paciencia que poseo, a eso de las 5am, la rubia cayó en un profundo sueño y yo me dormí un instante después que ella.

Los fines de semanas con mi princesa acostumbramos a dormir sin alarma, despertarnos tarde, unir el desayuno y el almuerzo en un solo platillo, pero esta vez fue distinto, a pesar de que durmió poco, a eso de las nueve de la mañana, estaba despierta. ¿Lo positivo? Es que ella se encargo de preparar el desayuno y traerlo a la cama, me causa gracia pero a la vez nervios, el grado de ansiedad que mantiene...

En este momento, ella está en su habitación vestida con una bata, tomando la difícil decisión, ¿Qué es lo que finalmente utilizará esta noche? Mientras tanto, el inicio de mi plan se acerca, me tengo que vestir para la ocasión, elegí vestirme con una remera blanca, un pantalón de jeans negro, zapatillas blancas, y una chaqueta color beige, me perfumé como de costumbre, me arreglé el cabello, tomé mis pertenencias y caminé hasta la puerta de la habitación de la rubia. Ella me dijo que pase, así que lentamente abrí la puerta...

—Princesa, iré a ver que necesita mi madre, pero regresaré a tiempo. –mentí asomado en la puerta

—Está bien, envíale mis saludos. –dijo ella para luego dejarla sola

04:50pm

Me estoy acercando a ese lugar, ese al que en algún momento llame hogar, con un par de cafés y algo para comer, pero llegué en mal momento, estaba la camioneta de mi madre en la entrada, el auto de mi padre, y por lo visto Michael ha renovado auto. Lo vi descendiendo de su nuevo vehículo, me crucé de acera, me quede parado detrás de unos arbustos que se encuentran afuera de la casa de los Boynton, verla a Katriona ya no me revuelve las entrañas como al principio, no transmito emociones hacia ella; ninguno. Su presencia me es indiferente.

Cambio de planes, caminé hacia la entrada de la casa de mi familia más leal, toqué la puerta, solo tuve que esperar unos segundos para terminar escuchando un grito proveniente desde dentro; "enseguida te abriré". Hasta que por fin veo la puerta abriéndose delante de mí, me atendió Emma, se encontraba vestida con una remera larga de mangas, un short de algodón, descalza pero traía largas y abrigadas medias.

— ¿Qué haces así vestida? Hace frío, te enfermaras. –dije mientras la saludaba

—Estaba en la cama, solo baje a prepararme un café cuando llamaste a la puerta. –respondió mientras caminábamos hacia la sala

—Entonces llegué justo a tiempo. –dije gracioso mientras le entregaba lo que traje

— ¿A qué se debe tu visita? Mis padres están trabajando...