Entonces... ¿Somos compañeros?

1. Empezando de nuevo.

" ¿Sabes que significa ser un héroe?

Significa que cuando eliges pasar tu vida ayudando a las demás personas, hay cosas que vas a tener que perder, cuando enfrentas la clase de amenazas que el encara, siempre habrá un daño colateral."

- Kate Bishop -

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El día es 14 de Enero, la temporada navideña ha quedado atrás, y es algo muy notorio, las tiendas anuncian ofertas en productos navideños, ya no se ve a ninguna persona vestida de Santa Claus, y aunque la temporada de frio no se ha terminado, extrañamente se siente una gran calidez en el ambiente.

Es una noche fría en la ciudad de Nueva York, a cualquier lado que mires, se ve gente por todos lados, algunos llevan bolsas de compras, otros simplemente están apresurados por llegar a su destino, toman el metro, intentar llamar un taxi, o caminan entre las transitadas avenidas, todo luce como un verdadero desastre, aunque ya es la rutina de la gran ciudad.

La ciudad parece calmada, al menos por esta noche, parece que no hay nada fuera de lo común.

De pronto, de la nada, se escucha una alarma al interior de una joyería, seguido de varios disparos al aire y constantes amenazas en un tono no muy amigable:

— ¡RÁPIDO, EMPIEZA A LLENAR LAS BOLSAS! — dice el hombre denotando prisa y cierto grado de enfado — ¿O acaso quieres que la policia venga y nos metan de vuelta a Rykers? — termino de decir.

— Solo cierra la boca y asegúrate de que ninguno de estos quiera hacerse el héroe — dijo su compañero en tono mas calmado, se podía notar que era el que estaba a cargo.

Las personas que se encontraban en la joyería al momento del robo, solo podían ver a los hombres con miedo, y cuando pensaban en escapar, veían a otros 4 cuidando la entrada para que nadie entrara, o saliera.

Mientras no la veían, una mujer que estaba arrinconada, intento disimuladamente utilizar su celular, que tenia en el bolsillo trasero, para poder llamarle a la policía. 

Ya lo estaba consiguiendo, había podido marcar los primeros dígitos, pero entonces uno de los hombres volteo hacia donde estaba ella, y vio lo que estaba haciendo, así que le dijo muy enojado:

— ¡¿OYE, QUE DEMONIOS CREES QUE ESTAS HACIENDO?! — le grito el hombre mientras se dirigía hacia ella, para arrebatarle el teléfono, y luego apuntar su arma hacia ella — Odio a las personas que juegan a ser los héroes, pero ahora aprenderás que con nostotros, nadie juega — termino de decirle a la mujer que aterrorizada, suplicaba por su vida:

— POR FAVOR, SE LO SUPLICO, TENGO UN HIJO, ¡NO HAGA ESTO! — y mientras las suplicas de la mujer parecían no tener efecto, el hombre estaba por dispararle cuando...

*Tremendo estruendo*

El hombre fue derribado con una poderosa patada que lo mando pocos metros mas allá de donde se encontraba.

— ¡¿QUE CAR#JOS?! — ¡ES EL!, NO SE QUEDEN VIENDO, DISPARENLE. — grito el hombre muy molesto, pero a su vez con un tono de preocupación.

Los disparos resonaban por toda la calle, siendo ninguno efectivo en atinar a su objetivo, este ultimo, mientras esquivaba las balas, iba neutralizando a los hombres de la entrada, pegándolos con telaraña a las paredes y a los postes.

— ¡Oye, si querias obtener joyería sin esfuerzo, yo conozco un lugar donde venden excelentes copias de calidad media, eh! — dijo Spider-Man, mientras desarmaba al ultimo tipo que se encontraba en la salida, ahora solo quedaba el hombre a cargo, que había aprovechado para tomar a la mujer y apuntarle con su arma en la cabeza