Capitulo 13: "Seguro de puerta"

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Capitulo 13: “Seguro de puerta”

-Bill, es que enserio no lo entiendo. ¿Cómo es eso de que eres mi hermano?  Que “nuestros” padres eran prófugos y que no se qué otras cosas más. Que estupidez.

-Tom, ya cálmate. Quizás Sahara no nos miente, o quizás es una loca. Tendremos que investigar sobre eso, pero no ahora, primero debemos enfocarnos en rescatar a Gared y a Ésme.

-…Incesto...

-… ¿Incesto?- Bill miró a Tom con una incógnita en la cara. –Tom, no estarás pensando que cometimos incesto.

El moreno miro a Tom, y vio en la cara del de trenzas la mirada delatora.

-Ah, ¡Tom! ¡No seas tonto! Ya deja de pensar en eso.- Dijo Bill dándole un golpecito en la cabeza a Tom. –vamos que se nos hace tarde.

-Jajajajaja- Comenzó Tom a reír a carcajadas.

-¿Tom? ¿Qué pasó ahora?

-Se te rajó el pantalón, Jajajajaja

-¡¿Qué?!- Dijo Bill intentado mirar su parte trasera.

-Jajajajaja, ¡te ves tan gracioso!

-¡No! ¡Mi pantalón!- Dijo un Bill horrorizado. – ¡No! Qué haré…

-Venga, que no es para tanto, Bill.

-¿Que no es para tanto dices? Claramente es porque no fue a ti a quien le paso esto.

-Puede ser… Pero no hay nadie aquí además de tú y yo… así que deberías de tranquilizarte, ¿no crees?

-Si claro. Ten ayúdame con esto.-dijo Bill abriendo el bolso que llevaba consigo, sacando así un pantalón negro apretado de cuero –Listo, lástima que era uno de mis favoritos.- dijo con disgusto. –Bueno, vámonos.- Dijo cuando ya estuvo listo.

-Billy…

-¿Dime, Tomi?

-Tomi…

-Ha-ha que gracioso.

-¡Nah! Billy, ¿de verdad no le crees a Sahara?

-Nene, no es que no le crea, es solo que no sé nada sobre esa historia y…

-¿La conocías? Es decir a ella, a Sahara.

-Woo, tu si que cambias de tema rápido.

-¿Y bien?

-Pues… Si, más bien la conocí de vista. Ella hacia tratados con mis padres en los momentos de batallas contra los de tu especie.

-¿Ella luchaba contra los míos?

-Ni tan así, ella no luchaba, ella nos cedía partes del bosque a ambas especies, pero si causábamos algún mal a sus plantas, árboles o animales vivientes de por aquí, ella se encargaba de matarnos.

-Ok, pero sigo sin entender cómo es que la conoces.

-Maté a uno de esos perros y se enfrento contra mí, la mande a freír monos al África y como que se enamoro de mi por ser más fuerte que ella y no temerle, puesto que todos los que la veían se cagaban en los pantalones.

-Entonces… se podría decir que era una vieja enamorada tuya.

-Si algo por el estilo.

-¿Y cómo es que no te mató por negarla?

-No me pudo matar antes, ¿por qué lo haría en ese entonces?

-Tienes razón, ¿y acaso no la reconociste de inmediato?

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