Os presento mi historia de Marvel.
Espero que os guste. Podéis encontrar el resto de historias en mi perfil.
Ninguno de los personajes o de los GIFs son de mi propiedad.
- Stephen, ahora mismo no tengo ganas de ponerme a practicar.
- ¡No es eso! ¡Tú ven!
Suspiré mientras ponía el marcapáginas en el libro que estaba leyendo y lo dejaba a un lado del escritorio.
- Como sea una tontería me voy a cabrear contigo.
Cuando estuve en lo alto de las escaleras me quedé de piedra.
- ¿Qué has hecho?
- Sorpresa.
Todo el rellano estaba cubierto de una densa capa de nieve y pronto sentí que también caían copos del techo.
- ¿Por qué? - aunque no entendía nada no pude evitar sonreír como una niña.
- Felicidades - dijo Stephen, el cual me guiñó un ojo de manera cariñosa.
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- Pero si todavía no es Navidad... - de repente una luz se encendió en mi cabeza - ¿Cómo lo sabías?
- Es mi obligación como Hechicero Supremo saber todo lo que pasa en este edificio - se acercó hasta que quedamos cara a cara - Y es mi obligación como novio darte el mejor cumpleaños del mundo. Además, sé lo que te gusta la nieve y este año no tiene pinta de que vaya a caer nada en Nueva York.
- Llevo sin celebrarlo años - admití.
- Lo sé, por eso este recuperaremos el tiempo perdido.
Me dio un beso dulce. Yo todavía seguía pensado en la sensación de sus labios sobre los míos cuando una bola de nieve nos dio directamente en la cara.
- ¡Wong!
- Esto por manchar toda la entrada.
- Lo limpiaremos.
- Eso espero - pasó su mirada de Stephen a mí y esta se relajó - Feliz cumpleaños ___________.
- Muchas gracias.
En cuanto hubo desaparecido por un portal, Stephen volvió a acercarme a él y me dio otro beso profundo.
- ¿Sabes que podríamos haber ido a cualquier lugar del mundo en el que esté nevado en menos de diez segundos no?
- Sí, pero así es más divertido. ¿Quieres hacer un muñeco de nieve?
