🔗 ·٠•●𝕃𝕦𝕚𝕤 𝕄𝕚𝕘𝕦𝕖𝕝 ♦ ℕ𝕠𝕤𝕠𝕥𝕣𝕠𝕤●•٠· 🔗

Parte 7

Habían pasado días desde que durmió otra vez en mi casa. Las cosas entre nosotros volvían a estar tranquilas, como antes. Ella ya no estaba rara conmigo y yo me había portado bien, como le prometí. Aunque eso no me quitaba las ganas de querer besarla cada vez que la veía. 

Sigo trabajando bastante en el estudio, así que tampoco nos hemos visto mucho.

Hoy me desocupé más temprano y pasé a casa de unos amigos. La verdad, no sé qué celebran hoy, pero supongo que ella estará también ahí, así que entre otras cosas, por eso voy.

Entre otras cosas, si claro. Voy por ella, nada más.

Ya llevaba más de una hora ahí y ella no llegaba. Y aunque el whisky no estaba mal ¡Me estaba aburriendo horrores! De pronto veo llegar a Elba, sonreí porque pensé que venían juntas, pero no. Nada que aparecía y ya me estaba hartando un poco.

- ¿No vienes con Peque? -Le pregunto-

- No ¿Por qué?- Dice buscando en mi cara algo que delate lo desesperado que estoy por verla-

- ¿No tenía una cita con tu amigo?- Le pregunta Bobby restándole importancia y ella lo fulminó con la mirada-

-¿Cuál amigo?- Le reclamo a Elba-

- Cristian...- Dice encogiéndose de hombros-

Tomo el celular y le marco mientras escucho a mis espaldas como murmuran algo que no alcance escuchar... No contesta, le vuelvo a marcar, lo mismo. Ya mi humor había cambiado por completo, sumando a eso que no sé porque mierda no contesta el teléfono. Me desespero, me enojo, puteo en voz baja hasta que ¡Por fin contesta!

- Lo siento corazón, estaba ocupada. ¿Pasa algo? - Su voz sonaba tranquila y dulce como siempre-

-No, nada Peque. ¿Estás en tu casa?-

- Si, pero...- Le colgué- Tomé lo que quedaba de whisky en mi vaso y fui a verla. A ver qué estaba pasando mejor dicho.

El viaje se me hizo eterno, me la imaginaba con el idiota ese intentando besarla y la sangre me hervía. Pero no podía llegar así a su casa tampoco. Me estacioné y tomé aire varias veces para calmarme. Un vez que lo logré, toqué a su puerta. Se escuchaban risas

 - Idiota- Murmuré una vez toqué a la puerta-

- ¿Qué haces aquí? -Dice sorprendida -

- Quería verte- Dije fingiendo una sonrisa-¿Puedo pasar? -Dije tratando de entrar-

- Estoy un poco ocupada ¿Por qué no vienes mañana? -Dice tomando mi mano -

-¿Haciendo qué? - Le digo ya un poco molesto- ¿Estas con alguien? Le pregunto tratando de mirar hacia adentro-

-Si Micky, estoy con un amigo- 

-¿Qué amigo?-La interrumpí-

- Eso no importa-

- A mí me importa- La volví a interrumpir-

-Cristian...- Dice suspirando- Los presenté el otro día-

-¿El idiota del bar? Lo recuerdo... ¿Estas en una cita entonces?- Pregunto enojado-

- No, solo estamos cenando ¿ok? - Dice con los brazos cruzados ya enojada ella también-

-Ahhhh...- Digo ya relajándome un poco- No quería  interrumpir- Mentí-

- Está bien. Tengo que entrar ¿Si? ¿Nos vemos mañana?-

-¿Puedo pasar al baño?- Le digo ya inventando cualquier excusa para entrar y ver qué pasaba adentro-

-¿No puedes esperar hasta llegar a tu casa?-

-¿Por favor? - Le suplico. Y suspirando me deja entrar-

Veo al tipo sentado a la mesa. Se sorprendió de verme poniéndose de pie.

-Ya te saludo- Digo mientras entro al baño. Me demoré a propósito, tenía que hacer tiempo.

-¿Como estás? - Le digo ya volviendo fuera, sin importarme su respuesta- Solo pasaba por aquí... que estés bien -Hice un gesto con la mano-

- Ya vengo- Le dice al imbécil ese y me acompaña hasta la puerta-

-Hueles a whisky... ¿Manejaste así hasta acá? - Dice reprochándome-

- Solo fue un vaso- Mentí otra vez- 

Y ahí ya me puse a hablarle de cualquier otra cosa para que no volviera aún con su tonto invitado. Cada vez que ya se iba , yo la abrazaba y la hacía reír para que no entrara.

-Sé lo que estás haciendo, Micky... -

- No sé de qué me hablas... - Sonreí fingiendo inocencia-

- Si que lo sabes- Dice sonriendo y negando con la cabeza-

Ella me conoce tanto, aunque quisiera ocultarlo sabe perfecto lo que estaba haciendo. Conoce muy bien ese lado mío, lo posesivo y celoso que puedo llegar a ser, sobre todo con ella. Así es nuestra relación.

Estoy tranquilo, al menos si yo no tenía una buena noche, tampoco dejaría que el idiota ese la tuviera con ella. 

No con mi Peque...