¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Estacione el auto con brusquedad, no me fije si lo cerré bien y tampoco me importaba, la tasa de crimen en la reserva era nula.
El corazón me latía con fuerza, abrí la puerta principal y no me fije contra que golpeó.
—auch por lo menos una disculpa Jasmine—Collin se tapaba la nariz pero lo ignore, solamente quería encerrarme en mi habitación.
—¿Jas estás bien?—unos suaves toques en mi puerta y la voz de mi mellizo
—vete Max quiero estar sola—mi pedido salio como un chillido por las lágrimas que comenzaban a rodar, pude escuchar el suspiro de Max y el sonido de sus pasos al bajar por las escaleras
Mi corazón dolía, ¿desde cuándo que el idiota de Jacob Black comenzaba a importarme?; antes de que se uniera a la pandilla de Sam, habíamos hablado casi pocas veces más que un simplemente saludo cordial.
El sonido de la puerta principal cerrarse y a los llamados de Brady me alertaron. Me asomé por mi ventana y pude reconocer la silueta de Max caminar por las oscuras calles de la reserva mientras la lluvia caía fuerte encima de su persona.
<<¿Qué demonios vas hacer Max?>>
~Jacob Black POV~
Unos fuertes golpes comenzaron a tocar la puerta, frunci el ceño pensando que se trataría de Sam, quien ya se habría enterado que salí de nuestro territorio para entrar al del enemigo por una humana terca.
El sonido del latido y el olor que emitía la persona me confundió, definitivamente era humano. Pero no me recordaba de quien podría ser.
—abre la puerta de una ve Jacob trato de dormir—se quejo mi padre desde su habitación sabiendo que por mi audición lobuna lo podría escuchar con perfección
—ya voy.—alce la voz para que la otra persona pudiera detener sus golpes en mi pobre puerta. Un chico pelirrojo de ojos cafés que me observaban con furia. —¿si?, ¿te perdiste?.—el chico se me hacía conocido pero no recordaba de donde.
—soy Max Fuller, el mellizo de Jasmine.
—ah..hola ¿sucede algo?.
—eso te vengo a preguntar
—¿pues no? Estoy en mi casa, así que será mejor que te vayas a la tuya.
—Escucha Black no puedes tratar a mi hermana como si fuera un juguete o una herramienta, no sé qué mierda sucede contigo y tu grupito de amigos pero aléjate a mi hermana.—la amenaza del humano me hizo sonreír con desdén
—¿Jasmine quiere eso?.
—Jasmine esta rota llorando en su cama, ¿tú que crees imbécil?. —su insulto provocó que mi mandíbula se tensara.
—oye yo no te he insultado así que te pido que no me insultes.
—lo hiciste cuando heriste a mi hermana. Ya de por sí tiene sus problemas como para que un niñato que no sabe lo que quiere le traiga más.
—Max, lo que sucede conmigo y tu hermana es nuestro problema así que vete.—me apoye en el marco de la puerta con los brazos cruzados y una mirada arrogante, noté como ese simple gesto lo hizo molestar.
—eres el imbécil más grande que he conocido Black, incluso más que Lahote—dijo antes de golpearme en la cara.
Tuve que controlar a mi lobo interior, respirar hondo, sus huesos crujieron. Lo que significó que se los rompió, su gemido de dolor me lo confirmó.
—no debiste a ver hecho eso—respire hondo, tuve que comenzar a pensar en la sonrisa de Jasmine para poder tranquilizarme y no matar a su hermano.
—¿pero de qué demonio estás hecho?—el chico afirmaba su mano fracturada, suspire antes de tratar de tomar su mano.—¿Qué?—iba a reclamar pero se quedo en silencio al ver mi mirada
—trato de ayudarte así que quédate quieto.—dije tomando su mano para analizarla.—esta rota, la voy arreglar así que respira hasta la cuenta de tres.—advertí antes de colocar la mano en la forma correcta y el crujir de sus huesos
—¡dijiste hasta 3!—el chico lloriqueo mientras se iba a donde supongo al hospital
—de nada por cierto.—dije mientras volvía a entrar a mi casa
—¿Quién era hijo?.
—era el hermano de Jasmine, pero ya lo resolví, vuelve a dormir.—dije antes de caminar a mi habitación, no estaba del mejor humor, podía sentir la tristeza de Jasmine y a mí lobo odiandome por ser la causa de ello.
