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La muerte, la última etapa de la vida. La etapa que no se puede revertir por más que uno quiera.

Hace un tiempo mi mamá murió. Puedo decir que el día que me enteré de ello fue el momento más doloroso de mi vida. Pero lo que sigue es aún peor.

Que puedo decir. Ya experimente o bueno sigo experimentando ese lado oscuro de la vida.

Según Internet hay cinco fases del duelo: etapa de la negación, de la ira, la negociación, la depresión y por último la etapa de la aceptación.

Yo aún estoy en la cuarta etapa, en la etapa de la depresión. Siempre me e sentido vacía, triste, inútil, infeliz. Pero todo empeoró con la muerte de mi mamá y la maldita depresión que me hunde cada vez más.

He tratado de salir a flote. Hubo veces en lo que sentía que todo iba a mejor pero no, recaía y me hundía en lo más profundo.

Esos momentos en lo que nadie se da cuenta de que estas triste, vacía.

Ha llegado el momento en que ya no siento nada. Solo un vacío. Como si estuviera muerta en vida. Pero tengo que fingir cada día que estoy bien, que nada pasa. Momentos en los que quiero y deseo morir, en los que imagino que estoy saltando de algún puente, o tomando pastillas, o me corto, pero todo llega al mismo punto. Al momento donde ya no respiro, ya no se escucha mis latidos del corazón, donde ya no corra sangre por mis venas, donde... deje de existir. De una vez por todas.

¿Cómo seguiré adelante? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora