XXIV. Festival

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Jimin y Hoseok realizaban su último ensayo para el festival cultural, ambos harían un solo, mientras Jimin haría danza contemporánea Hoseok haría algo más urbano. Jimin admiraba el dominio que tenía Hoseok sobre su cuerpo y la facilidad con que se movía haciéndolo ver tan natural que cualquiera diría yo puedo hacerlo. Sin embargo, era difícil y eso lo hacía admirar más a su amigo.

Hoseok por su parte amaba la elegancia con que Jimin hacía aquellos giros en el aire, parecía un ángel que descendía del cielo. — Hobi, ten cuidado en ese movimiento... Me percate que es fácil deslizarse en ese lugar.

— Le dije al administrador que lo recubrieran antes para evitar un accidente.

— Espero que lo hagan ayer en la práctica casi caigo de boca.

— Tú siempre te caes Jimin... — dijo Hoseok sonriendo, Jimin hizo un puchero y continuó bailando. — Hace unas semanas tuve miedo Jimin.

Jimin se detuvo y recordó el incidente que le había contado Young-Mi, habían pasado dos semanas desde el intento de violación de Siwon y la golpiza vio a su amigo quien observaba la ventana con una mirada triste, ambos agradecía que hubiesen atrasado el festival pues Hoseok había quedado muy maltratado como para bailar. — Imagino que te trajo recuerdos.

— Fue como volver a sentir a aquellos hombres sobre mi y solo pensaba en mi bebé...  Pese a no tenerlo en mi vientre, es que volví al pasado y mi mente se cerró.

Jimin se acercó y lo abrazó, su cuerpo temblaba y sin quererlo las lágrimas se escaparon de sus ojos sin poder contenerlas. Jimin no pudo evitar sentirse mal, su amigo había pasado por mucho en el pasado, maltratos y abusos de parte de aquel desgraciado y ahora alguien parecido venía a lastimarlo. — Hoseok, no te dejes vencer por los recuerdos, confía en tu familia y los recuerdos que han construido juntos, eso debe darte el poder de vencer a esa persona.

— Eso intenté, pero me sentí tan nervioso y desprotegido... Jimin siempre dependo de los demás, puedo defenderme legalmente, sin embargo cuando se trata de fuerza siento temor, a veces me despierto en la noche pensando en que entrará a golpearme. 

— ¿Le dijiste al Pervertido de esto?

Hoseok negó con la cabeza, no había querido decirle a Taehyung de lo que había sentido cuando Siwon lo había acorralado, tenía la misma aura de su padre y estaba seguro que si Siwon trataba de lastimarlo lo conseguiría. Yae-Miung era una persona muy violenta y con una presencia aterradora, siempre que lo enfrentaba sentía un dolor en el pecho que lo ponía nervioso luego venían los golpes e insultos. 

— ¿Hoseok? — Jimin lo veía con la mirada perdida y sintió temor de su amigo, en el pasado cuando eran solo unos adolescentes, Hoseok solía tener esa mirada cuando su padre lo maltrataba y siempre Jimin lo ayudaba, pero ahora Jimin sentía que no tenía el poder para ayudarlo. — Dile a Tae...

— No. Mañana es el festival y no voy a preocuparlo con eso, recibirá un premio y quiero que esté muy feliz... ¡Jimin prométeme que no le dirás!

— No creo que sea lo correcto, pero no voy a hacer algo que no desees hacer. 

— ¡Papá!— Gritó Dongpyo acercándose a Hoseok.  Este se limpió las lágrimas y fue a su encuentro. 

— ¿Qué pasa, cariño?

— Papá tiene nueva editora y es una chica bonita. 

— ¿Empezaremos con lo mismo? Tienes dos semanas con ella y...

— No te preocupes  Afrodita, vamos a destruirla antes que se acostumbre a él. 

Hoseok negó, se fue a dar un baño para luego ir con su hijo a traer a Tae-Hyun, mientras Young-Mi estaba en clases de defensa personal. Cuando pasaron por Tae-Hyun, Hoseok, los llevó a la editorial donde Taehyung estaba dejando su manuscrito. — Hyun, espero que puedas ayudarme en mi misión.

Kiss Me quick II "Read my mind"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora