40

997 210 11
                                    

La cama de Gulf era amplia, lo suficiente para poder dormir ambos, aun así, preferían dormir casi encima del otro

Con Gulf abrazándolo como koala, Mew ya no sentía su brazo por la posición en la que estaba, debajo del otro, rodeando su cintura.

Aun así, no se molestó en quitarlo, no quería despertar a su novio.

Era de madrugada, y Mew se había despertado, terminando en un momento de insomnio que quería destruir, pero no podía.

Así que se quedó despierto, mirando a Gulf, acariciando sus mejillas, cuello y cabello lentamente, para no despertarlo.

El rato pasó, Mew había terminado contando las pequeñas pecas que tenía el cachetón, ya iba unas cuantas cuando notó las manos de Gulf moverse apenas un poco en sueños, sonrió con ternura.

Al principio, no podía evitar mirar lo adorable que parecía, aunque no supo en qué punto, lo que pensó que era un sueño resultó ser una pesadilla.

Gulf frunció el ceño, negando, apretaba sus ojitos, sus labios comenzaron a moverse, y Mew escuchó lo que creyó un murmullo provenir de ellos.

El corazón de Mew se aceleró, y recordó de meses atrás, cuando supo que Gulf podría hablar pero inconscientemente, había bloqueado su voz.

Se acercó un poco más a él, preocupado.

— .Gulfi...— habló con suavidad, el chico seguía con el ceño fruncido, negando, ahora un poco más fuerte que antes—. Es un sueño, es solo un sueño, despierta...

N-No...

Mew alzó las cejas, su corazón comenzó a latir más fuerte.

Una dulce palabra, con una voz aún más dulce, aguda, a pesar de que había sonado bastante ronca.

Mew se acercó aún más, abrazando a Gulf, acomodando el rostro del chico a la altura de su cuello, dejando besos en su coronilla, acariciando su cabello.

— Shhh... Estoy aquí, bebé— murmuró—. Todo está bien, despierta... Es sólo un sueño...— murmuraba.

M-Mew...— escuchó, en una voz más calmada que antes, y sintió su corazón desbocar.

Sonrió, sus ojos se nublaron un poco.

— Sí, bebé, soy yo... Estoy a tu lado.

Gulf negó de nuevo, esta vez, más lentamente, despejando su vista.

Alzó las cejas al ver a Mew con lágrimas, alzó su mano para preguntar, pero el rubio sólo negó, besó sus labios, con cariño, algo rápido para el gusto de Gulf, quien lo seguía mirando confundido.

— Nada, bebé, nada— dijo Mew, aún sin poder borrar su sonrisa.

Mute (MewGulf)¹ FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora