Las Rosas del Sultán ©✔️ [+18]

Capitulo 9

Narrador omnisciente

Oro, dulces, comida, y joyas eran repartidas en el harem por el anuncio de la llegada del posible nuevo príncipe. Harika estaba sentada tratando de disfrutar de la celebración, pero se le era imposible, con el pasar de las horas se acercaba aún más la partida de Osman. Ahora no sólo debía cuidarse ella, si no que también al bebé que llevaba en su vientre, era una carga mayor para su conciencia.

En otro lado del palacio se encontraba Hafsa charlando con Ali pasha, un miembro del consejo.

...

—Berat irá a la guerra, es imposible que pueda reclamar el trono —dice Hafsa tocando los nudillos de sus dedos.

—creo que deberíamos esperar más mi sultana —respondió Ali —la paciencia es la clave para el éxito.

—paciencia tengo de sobra, lo que no tenemos es tiempo, mientras más hijos tenga Osman más difícil se volverá colocar al mío en el trono.

—a todo esto mi sultana —Ali interrumpió —Berat...¿está de acuerdo con esto?

—No, él no lo sabe aún —Hafsa desvió su mirada —no estaría de acuerdo en hacer algo en contra de su primo.

—¿y la sultana Harika?, que haremos con ella

—es sólo una niña jugando a ser sultana —Hafsa miró Ali a los ojos —déjala que se divierta.

...

—los barcos están listos para zarpar mi sultán —Berat le daba los últimos detalles del viaje a Osman

—no iremos en un par de días Berat —dice Osman para exhalar un poco de aire fresco —con Allah por delante volveremos victoriosos.

—Amén...¿Osman?

—Si

—¿es cierto que casarás a melek con hurhan pasha?

—así es, creo que es el mejor esposo para ella —Osman voltea a ver a Berat —¿algún problema?

—No, claro que no...

Ambos salieron de los aposentos de Osman para dirigirse al jardín interior —¿conseguiste lo que te pedí? —Osman le preguntó a Berat, estaba hablando de un cabello negro para Harika, se lo daría en cuanto diera a luz.

—Si, tendrá que estar aquí en un par de meses, para nuestra llegada ya debería estar aquí.

—perfecto.

...

—¿quiere dulces mi sultana? —goker le ofreció un platillo a Harika —¿o a lo mejor lokum?, ¿o un poco de baklava?

—gracias goker... —respondió Harika —pero no se me apetece nada.

—no quiero que se me enferme mi sultana —dejo el plato delante de ella —coma algo por favor.

—es una orden Harika —dijo Ayse sin despegar la mirada de su libro. —come

—bien —dijo Harika tomando un pedazo del postre y dándole un mordisco en una esquina.

—¿porque estás tan decaída? —Ayse miró esta vez a la peli negra —¿te a pasado algo?

—No

—¿entonces?

—solo no quiero que Osman se vaya.

—no te preocupes, ya encargué que todas tus cosas estén mis aposentos por estos meses —Ayse volvió a su lectura —Diana también estará con nosotras.