Capítulo 27: Believe me

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5 de Noviembre de 2005

Una chica estaba observando la gran piedra. Tallada delicadamente con detalle. Cada palabra, cada letra.

El aroma que desprendía las flores hacía que el ambiente fuera más agradable. O al menos, ese sería su cometido, si enfrente de ella no estuviera la tumba de su amigo.

Esta se arrodilló hasta estar a la altura de la tumba.

— Perdón por no haber venido antes. —tocó el gravado con delicadeza— No me sentía muy bien...—sus ojos comenzaron a empañarse— Todo el mundo me ha contado lo sucedido...—se mordió el labio intentando aguantar las lágrimas— Me...me dijeron que hace dos días fue tu cumpleaños...—agachó la cabeza hacia el suelo, las lágrimas comenzaron a caer— Podrías tener 15 años ahora...

Su vista volvió de nuevo a la lápida, que estaba enfrente de ella.

— Yo...no quería que pasase nada de esto... si...si hubiera sabido... que esa iba a ser nuestra última conversación...yo...—con su manga intentó limpiarse las lágrimas, sin éxito alguno— He...he intentado recordar cada detalle de lo que pasó...aun no entiendo porque querías matar a Kisaki...no...no lo logro entender. —respiró fuerte— Mitsuya-kun me dijo que él me ayudó.

Cerró los ojos durante un momento. Varias imágenes pasaban por su mente, pero todas borrosas.

— De verdad no lo entiendo...no entiendo nada. —se llevó las manos a la cabeza con desesperación— Pero de verdad quiero creerte... no hiciste eso sin ninguna razón... de verdad que quiero creerte...no eras una mala persona...

De pronto, un ruido entre los matorrales asustó a Kata. Esta giró sobresaltada hacia ellos. De pronto, entre los arbustos, salió un pequeño gatito de color negro, parecía un cachorro. La adolescente lo miró curiosa.

El pequeño gatito se acercó a la chica, haciéndole pequeños ronroneos. Esta acercó su mano para que la oliera, y cuando vio que el animal confiaba en ella lo acarició. Este parecía corresponder los mimos, ya que lamió su pierna.

Esto provocó una pequeña sonrisa a la adolescente, ya que le hizo cosquillas. Con delicadeza para no asustarlo, lo agarró y lo puso en su regazo. El cachorro miró a la chica haciendo ambos contacto visual.

De pronto, Kata sintió algo dentro de ella, un pequeño escalofrío. Ese gato tenía los ojos iguales a...

Miró rápidamente la tumba de enfrente y luego al gato, y así consecutivamente. ¿Sería posible qué? No... Era imposible, sería todavía los efectos del suero del hospital.

— Bien, ya podemos irnos. —dijo detrás de la chica Aneko. Kata giró para ver a su hermana, tuvo que alzar la cabeza ya que seguía sentada en el suelo— ¿Qué haces con un gato?

Kata volvió al pequeño gato, este parecía haberse quedado dormido entre las piernas de la chica.

— ¿Nos lo podemos quedar?

6 de Noviembre de 2005

— ¿Enserio te dejó que te lo llevaras?—preguntó Emma asombrada.

— Tuve que negociar bastante con ella, pero sí.

— A veces me impresiona tu nivel de convención.

La rubia se levantó del suelo de la habitación para agarrar una de sus revistas. Kata la miraba desde la cama, que se había sentado en el borde de esta.

— ¿Y cómo lo vas a llamar?

La chica lo pensó durante unos seguidos.

— Ya que me encontré al gato en su tumba... creo que le llamaré... Keisuke.

DEATH (Manjiro Sano/ Mikey)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora