- ¿Hyung? ¿Estás ahí?-
- ¡Oh! ¡KyungSoo, apresúrate y encuentrame!-
- No puedo escucharte Hyung, hablá más fuerte.-
- ¡Estoy aquí KyungSoo! ¡Deprisa!-
Gotas de sudor frío resbalaban por su frente. El mismo sueño noche tras noche.
En sus sueños siempre se veía así mismo cuando aún era pequeño jugando con un chico mayor que él. En esos sueños KyungSoo no podía ver el rostro de ese chico, solo podía recordar la voz risueña que le pedía que lo encontrara.
Corría y corría siguiendo la voz del chico, seguía el sonido de la voz y buscaba por las habitaciones algún rastro del muchacho. Iba a la recámara principal, a las habitaciones de servicio, buscaba debajo de las camas, en la cocina, en todos los lugares de la casa, pero nunca podía encontrar al dueño de esa voz. Cuando lograba ver la silueta del chico, éste corría riendo y desaparecía en un fondo oscuro. Una sensación de soledad y miedo se apoderaba de KyungSoo, y en sus sueños lloraba tratando de alcanzar de alguna manera al chico que se alejaba entre la oscuridad. Gritaba desesperado un nombre que cuando despertaba no podía recordar, solo la sensación extraña de añoranza y el sentimiento de extrañar a esa persona hacía que su pecho doliese.
- No te vayas Hyung...- murmuró entre sueños.
MinSeok escuchó el mumurllo de KyungSoo, se acercó a su lado para ver qué le sucedía. Al mirarlo, pudo ver el entrecejo fruncido de KyungSoo y gotas de sudor bajando por su frente. Murmuraba cosas sin sentido al menos para MinSeok, miró algunas lágrimas resbalar de los ojos de KyungSoo. Trató de despertarlo del sueño que lo atormentaba, sacudió un poco el hombro de KyungSoo, pero el chico no despertaba, continuó sacudiendolo hasta que KyungSoo se sentó de repente con los ojos muy abiertos y con el corazón agitado, el pecho de KyungSoo subía y bajaba a un ritmo fuerte.
- ¿Estás bien?- preguntó MinSeok al verlo despierto.
KyungSoo miró a MinSeok a su lado con el rostro preocupado, parpadeó un par de veces antes de asentir. Sintió humedad en la mejilla, llevó su mano hasta ella y cayó en cuenta que estaba llorando mientras dormía.
Todo había sido un sueño.
MinSeok miró unos segundos a KyungSoo, y al notar que la mente de KyungSoo aún seguía nublada por el sueño, optó por volver a dormir.
- Durmamos, aún falta para que amanezca.- dijo MinSeok volviendo a enredarse entre las cobijas desgastadas.
KyungSoo asintió en silencio tratando de tranquilizar su corazón acomodandoce entre el colchón viejo que compartía con MinSeok. No creía que pudiera dormir el resto de la noche, las sensaciones que le dejaba ese sueño en el corazón lo hacían sentir sensible, nostálgico, como si hubiese sido algún momento de su vida que ya había olvidado. KyungSoo en momentos así se sentía muy vulnerable.
- Lamento haberte despertado MinSeok Hyung.- KyungSoo se disculpó.
- No te preocupes, se lo que se siente tener pesadillas. A veces yo quisiera que alguien me despertara de ellas.-
Sin decir nada más, KyungSoo miró a MinSeok crubirse con la cobija hasta la cabeza, no hubo más palabras dichas.
Mirando al cielo por medio del techo caído de una vieja casa abandonada, KyungSoo se quedó pensando en muchas cosas, en como había cambiado su vida drásticamente desde que huyo de casa. Habían pasado quizás un par de semanas, y de no ser por MinSeok estaría muerto, pero estaba ahí, viviendo, y por primera vez sintiéndose libre. No había golpes, no había insultos, no estaban sus padres para dañarlo física y emocionalmente. Y sentía un poco de paz. Por qué al final de cuentas KyungSoo estaba mejor sin ellos.

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Nuestra Historia De Amor [KaiSoo]
RomanceEstá historia NO es una secuela de Síndrome (KaiSoo) es una historia totalmente diferente, con un final diferente, pero con la misma temática. Sinopsis: JongIn es un chico con una discapacidad mental que tuvo la mala suerte de nacer en un hogar no...