Nuestra Historia De Amor [KaiSoo]

Capítulo 15: Oscuridad

Furia.

Nada podía describir mejor ese sentimiento de enojo que brotaba de sde él.

Todos eran unos inútiles. Nadie de esa bola de parásitos había logrado encontrar al mocoso, ¡Por Dios! ¿Qué tan difícil podía ser encontrar a un adolescente? ¿Dónde podía esconderse si ya no le quedaba nada? Hasta ese punto dudaba que el inútil que le debía hubiese hecho algo como esconder al chiquillo, el hombre claramente no quería al mocoso, la prueba estaba en qué el chico había escapado de su casa mucho antes de que él llegara a ese país.

Pero ¡Al diablo! A él que rayos le importaba, solo quería de vuelta su dinero. Había dado una sencilla orden: Encontrar a ese tal KyungSoo, ese hijo del parásito del cuál se había encargado de exterminar en cuanto el tiempo de paga se había terminado. Vaya que había disfrutado cada instante del sufrimiento del hombre.

MinSik había llorado y suplicado por su vida, incluso había hecho promesas que por razones obvias jamás cumpliría.

Había estado vigilando a MinSik, el muy desgraciado había intentado huir un par de veces como la rata que era, pero la casa (sin mencionar todo el vecindario) había estado siendo vigilado por sus hombres. En el último día de vida del tipo, había intentado suicidarse, había amarrado una soga al techo de la casa, y sin dudarlo un segundo se había lanzado para terminar con su vida, y lo habría hecho si la mujer que tenía por esposa no hubiese gritado del horror. Gustav quién se encontraba montando vigilancia en lugar de estar disfrutando de alguna mujerzuela, había escuchado el grito aterrador de la mujer, sin dudarlo un segundo, él, junto a un grupo de hombres interrumpió la casa mirando al hombre retorciéndose en el aire con la soga al cuello, a William no le gustaría que muriera así de fácil, no permitiría que el tipo muriera sin sufrir un poco, así que, sin dudarlo, Gustav cortó la soga y el hombre cayó al suelo dando un fuerte golpe seco.

Con una sonrisa de sorna, Gustav se había agachado para burlarse en la cara del hombre y en un perfecto alemán había dicho:

- Du wirst nicht so leicht sterben, ja,- no morirás tan fácilmente.

El hombre se retorcía en el suelo del dolor, su cara estaba completamente roja y como si fuese un tatuaje, la cuerda había quedado marcada a su alrededor, ni siquiera había entendido lo que el hombre extrajero había dicho, al mirar su cara de confusión, Gustav miró a un hombre a su lado, un hombre que manejaba los dos idiomas.

- Übersetzen Sie diese Nachricht für ihn,- traduce esté mensaje para él.-

El hombre asintió.

- Bill wird dich nicht so leicht sterben lassen, er wird mit dir spielen wie eine Katze und wenn er zufrieden ist, wird er dich eliminieren, deinen Körper in Stücke schneiden, selbst wenn du am Leben bist,- Bill no te dejará morir tan fácilmente, jugará contigo como un gato y cuando esté satisfecho te eliminará, cortará tu cuerpo en pedazos incluso si estás vivo.

MinSik tembló de miedo al escuchar al hombre traducir cada palabra dicha por el extranjero, la mujer lloraba en un rincón de la casa con las  manos cubriendo su boca debido al horror que había escuchado.

- Wenn du nicht ohnmächtig wirst oder früh stirbst, verfüttert er dich an seine Haustiere und zwingt dich, ihnen dabei zuzusehen, wie sie deine Fleischstücke fressen. Am Ende wird er Ihren Kopf unversehrt irgendwo in der Stadt zurücklassen, als Warnung für andere,- Si no te desmayas o mueres antes, te dará a sus mascotas y te obligará a verlos comer tus trozos de carne. Al final, dejará tu cabeza intacta en algún lugar de la ciudad como advertencia para los demás.- Gustav sonrió con satisfacción al ver el rostro horrorizado del hombre, su respiración era errada, los temblores de su cuerpo ya no eran debido al dolor del intento de acabar con su vida.