Cap. 21 - DÍA ESPECIAL

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MARTÍN

Siento que en mi estómago danzan un centenar de mariposas alocadas. Casi no he podido comer nada de lo nervioso que estoy. Disimuladamente huelo mi camiseta, en ese punto dónde la tela aún conserva el olor de mi bella Ludo. La extraño. Nuestra despedida de hoy fue demasiado rápida, ya que su tía la necesitaba en casa y me tocó ver cómo desaparecía de mi vista luciendo el uniforme del restaurante donde trabaja. Solo espero que su tía le dé permiso de salir mañana, muero por pasar el día entero con mi rubia festejando nuestro primer mes de novios. Tengo todo el día de mañana especialmente planeado, lo único que me molesta es que el tiempo pasa demasiado lento.

- Hijo, ¿estás bien? - La voz de mi madre me hace levantar la vista de mi móvil.

- Sí, mamá.

- Mmm... no parece. Casi no has tocado tu cena y ahora no paras de jugar con la mousse, es tu postre favorito. ¿Sucedió algo con Ludo? ¿Se pelearon?

- No. - Mi negativa sale demasiado rápido, y no me sorprende que ni mi cerebro conciba la idea de estar sin Ludo. - Ludo y yo estamos muy bien, es solo que... estoy... algo nervioso. - Reconozco con timidez.

- ¿Nervioso porque, mi amor? - Me pregunta interesada.

- Mañana es nuestro primer aniversario de novios. - Confieso. - Mamá, nunca pensé en enamorarme, ni mucho menos así de intensamente. Amo a Ludo, mucho. - Sonrió entre dientes cuando en mi mente aparece el rostro de mi novia. - Juro que a veces no puedo creer que ella esté en mi vida... que sea mía. Quiero pasar mi vida entera con ella... y eso da miedo.

- Enamorarse da miedo, mi cielo. Pero, al mismo tiempo, es maravilloso. Me hace feliz que hayas encontrado el amor. Tu primer amor... - La última frase la dice en un suspiro soñador y sonrió.

- Mi primer y... único amor. - Susurro, aunque dudo que ella me haya oído.

- Cuéntame... ¿Van a hacer algo para festejar?

Con una enorme sonrisa le cuento mis planes para mañana y mis nervios se calman un poco cuando mi madre aprueba mis ideas. De hecho, cuando terminamos el postre besa mi mejilla y se dirige a la cocina donde escuchó que le pide a Rita que prepare algunos bocadillos para mí, para mis planes de mañana. Es la mejor.

Subo a mi habitación, donde me quito la ropa para meterme en la cama, enciendo el televisor y trato de matar el tiempo, hasta la medianoche, viendo una serie que cambió a los 10 minutos por una película de Disney. Consulto mi móvil cada dos segundos, la ansiedad me está matando. Cuando por fin llega el momento, me incorporo en mi cama, tomo mi móvil y buscó el número de mi rubia. Me debatía entre enviarle un mensaje o llamarla y finalmente me decidí por llamarla porque anhelo escuchar su linda voz. Mi bella novia responde al instante lo que me hace sonreír como idiota.

- ¡Hola, amor! - Me responde con alegría y siento mi estómago cosquillear y mi pecho agitarse.

- Hola, amor mío. Iba a enviarte un mensaje pero quería escuchar tu voz... ¿eso está bien? - Pregunto algo inseguro.

- Está súper bien, amor. También quería escuchar tu voz.

- Eres preciosa... ¡Feliz cumplemes novia mía! Sé que nuestra relación no empezó como debía, pero no me arrepiento de nada porque soy el hombre más afortunado por ser tu novio. El día que me aceptaste como novio fue uno de los mejores días de mi vida... Todos los días contigo son mis días favoritos. Me haces muy feliz, amor. Este es sólo el primer mes de muchos meses que vamos a festejar. ¡Te amo mucho, novia mía!

Apuesta... al primer amor (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora