Como lo dice el título este libro se tratará sobre pequeños oh grandes escritos sobre mi Uchiha favorito.
¿Y porque?
Pues porque estamos cerca de su cumpleaños.
Contiene...
Yaoi.
También aparecerá Obito Fem.
Los personajes son propiedad de Masashi K...
Obito Uchiha era un estudiante universitario, un excelente deportista, a causa de eso era uno de los jóvenes más populares de la universidad, tanto chicas como chicos anhelaban andar con él, pero al azabache sólo le interesaba un chico y siempre iba a buscarlo a la salida del instituto Konoha.
- ¿Otra vez tú? -Preguntó el adolescente peliplata.
- ¿Puedo acompañarte? -Preguntó Obito.
- No, si no te alejas llamaré a la policía.
- ¿Porque a la policía?
- Porque soy ilegal. -Dijo dándose la vuelta, empezando a alejarse.
- ¿Eh? Espera bakakashi, ¿qué estás pensando? Sólo quiero ser tu amigo.
El adolescente caminaba apresurado hacia la estación de trenes, frunció el ceño al notar, cómo aquél joven universitario insistía en perseguirlo, hasta que logró alcanzarlo.
- ¿Porque me persigues? -Dijo el peliplata volteandolo a ver.- Déjame adivinar, eres un universitario perdedor que no tiene amigos y por eso buscas a adolescentes.
Obito sólo se quedó callado, aúnque se sintió un poco molesto cuando lo llamó perdedor, pero aún así no podía dejar de admirarlo ese chico era realmente lindo, aúnque no podía ver su rostro completo debido a esa mascarilla, estába cien por ciento seguro que su rostro era hermoso.
- ¿Que tanto me estas viendo perdedor?
- Hay vamos, no seas así conmigo, te invito a un helado.
- ¿Cuántos años crees que tengo, cinco? -Dijo con molestia.
- Bueno si no te gustan los helados, vamos por un café.
- ¿Qué parte de que te alejes no entiendes? -Dijo para volver a darse la vuelta y seguir caminando.
- Bakakashi. -Obito lo sujetó del brazo.
- Ya deja de decirme así, bobito. -Dijo molesto.- Suéltame oh voy a gritar.
- No harías eso.
- ¿Quieres probar? -Contestó arqueando una ceja, Obito lo quedó viendo un poco incrédulo sin soltar su brazo.
- ¡Ayuda! -Grito el adolescente- ¡Me quieren secuestrar!
Obito volteó a ver hacia todos lados mientras el peliplata gritaba, no tuvo otra opción que soltar su brazo, dió un suspiró viendo como su amor imposible se alejaba de nuevo, enamorarte de un chico de catorce años era realmente un problema, más cuando él ya tenía veinte años.
- ¡¿Porque tiene que ser ilegal?! -Exclamó el azabache con frustración, para después empezar a caminar en la dirección contraria, si tan sólo hubiera nacido unos años después, aúnque, aún estaba la opción de esperar a que el peliplata cumpliera la mayoría de edad.- Cuatro años bakakashi y ya no serás ilegal y así podré conquistarte sin miedos, ya buscaré la manera de alejar a todos esos mocosos, que andan detrás de ti.
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