𝐍𝐈𝐑𝐕𝐀𝐍𝐀 | ❝LA VERDADERA FELICIDAD LA ENCONTRÉ ENTRE MIS CARTAS❞.
Cuando el mundo peligra de las fuerzas oscuras, sólo aquellos que recuerden de donde proviene su poder más interno, son los merecedores de poder reclamar al mundo del lado de la...
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CAPÍTULO TREINTA Y TRES. Mientras Esté Aquí
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SE HABÍA TOMADO LA DECISIÓN DE QUE LLEGARÍAN A FLORIDA a través de un tren y después tomarían un avión.
Cuando Nirvana subió al tren, observó el asiento desocupado a lado de Yami y por otro lado al parecer Joey estaba guardando el asiento para ella o al menos por eso había movido a Tristán y su mirada estaba puesta en la chica, pidiéndole que se sentará a su lado.
No se consideraba a si misma como una persona resentida, pero debía admitir que lo dicho por el chico le había causado cierto dolor y todavía no podía olvidarlo del todo cuando solo había sucedido unas horas atrás, lo mejor en esos momentos era darle tiempo a las cosas, al menos para que todo se calmara un poco.
Cuando volvió a mirar el lugar donde el faraón estaba sentado, Téa ya se encontraba a su lado, tratando de hablarle aunque al parecer el chico solo se limitaba a mirar entristecido y distante por la ventana, y Nirvana no podía culparlo ya que después de todo Yugi era su amigo más cercano, pero sobre todo la persona que lo complementaba.
Sintió la mano de Edén sobre su hombro, quien al llamar su atención, con un movimiento de cabeza le pidió que se sentará a su lado, siguiéndolo hacía los asientos que quedaban detrás de Joey y Tristán.
