𝐍𝐈𝐑𝐕𝐀𝐍𝐀 | ❝LA VERDADERA FELICIDAD LA ENCONTRÉ ENTRE MIS CARTAS❞.
Cuando el mundo peligra de las fuerzas oscuras, sólo aquellos que recuerden de donde proviene su poder más interno, son los merecedores de poder reclamar al mundo del lado de la...
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CAPÍTULO VEINTITRÉS. Corazón Gélido
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DESDE LAS VENTANAS DE LA NAVE SE ALCAZABA A VER LA VISTA CUANDO LAS NUBES NO ALCANZABAN A INTERFERIR lo suficiente como para ocultar el paisaje, pero relativamente fuera así o no, era suficiente para hacer que la joven Bright se sintiera un poco más tranquila. Se llevó su mano al corazón, aferrándose con fuerza a el, mientras sus ojos contemplaban la vista, sabiendo que no había sido del todo buena idea tratar de conectar con la consciencia de Edén, ya que gracias a ello había podido lograr sentir las tinieblas y el como estaba sufriendo cada minuto de su estancia ahí, y eso la estaba pertubando bastante.
La única forma para traer a su hermano era vencer a Marik, y para eso tenía que ganarle en un duelo. Ya no importaba el si era una prueba para ella como duelista para probar si era lo suficientemente buena, en ese momento solo le importaba poder traer a Edén de vuelta, y es que a pesar de que muchas veces permanecieran lejos, sin verse días o incluso semanas, de una forma u otra siempre estaban juntos, siempre buscaban la manera de sentir la compañia del otro, pero ahora no había nada que le hiciera sentir su cálidez y aquello era doloroso, porque no podía permitir dejar a su hermano estar en un lugar tan oscuro como donde estaba, sin escapes, sin salidas.
Nirvana cerró sus ojos con fuerza, recordando todos aquellos sentimientos negativos que envolvían a su hermano, sintiendo cada uno en su interior con fuerza, recordando el como se transpasaban por la piel hasta llegar a su corazón.
