5: Segunda opción.

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5: Segunda opción.



Conforme los días pasaban los chicos y yo nos hacíamos más amigos. Por las mañanas nos dedicábamos a la grabación de la película para que después los chicos se fueran a grabar las canciones para el soundtrack de la película, por las tardes íbamos a casa de cualquiera de los chicos. Fue vergonzoso que a cada lugar al que fuéramos todo el mundo pensaba que era novia de alguno de los chicos, quiero decir, hablando éticamente, no era para nada moral que la escritora saliera con los actores porque eso sería como hacer favoritismo o algo así. Bueno además claro, que está el hecho de que era más que obvio que ninguno de ellos se fijaría en mí tomando en cuenta la falta de personalidad atractiva que claramente era notable en mí.
¿Ya me vieron? Parezco un Hobbit de cabellos despeinados y apetito de León.
Aquella tarde no era muy diferente a todas. Los chicos terminaron de grabar y casi de inmediato se fueron al estudio no sin antes asegurarse de arrastrarme con ellos para "tener una opinión profesional y femenina" con respecto a las canciones. Recibí un mensaje de Mark pidiendo que regresaran a grabar horas extras alegando que él viajaría por las próximas dos semanas. Así pues, cuatro horas y media después los chicos terminaron de grabar mientras yo terminaba de alistar mis cosas para salir junto a Margot.

—¡Hey, ___________!—llamó Alonso tras de mí—. ¿Quieres venir con nosotros a mi casa? Veremos películas y tal vez después juguemos al xbox, ¿qué dices? Puedes quedarte a dormir. Si quieres claro.

Lo pienso un largo momento antes de responder, la casa de los Villalpando era la única que hasta ahora no había conocido, y francamente prefería que fuese así. Ya fueron suficientes noviazgos para alguien con tanta mala suerte para mí.

—Entonces, ¿qué dices ________?

—¿Sobre qué?

—Sobre ir... A mí casa, a pasar el rato.

¡Dios mamá! ¿Por qué demonios no me enseñaste a usar un poco más la palabra no?

—Oh, ah. Sí, claro—asiento sintiendo el rojo vivo en mis mejillas.

Alonso me sonríe.
¿Acaso Dios creo a todos los artistas del mundo como super modelos?

—De acuerdo, estaremos listos a las nueve en punto, te esperamos en el estacionamiento.

—Por supuesto.

Habían pasado dos semanas y todo avance con Alonso era simplemente de "amigos", él simplemente se pasaba los días diciendo lo maravilla persona que era y que sabía que podía confiar con su "mejor amiga" En verdad la friendzone debe amarme demasiado o ya habría salido de este lugar.

—_________, ¿estás escuchándome?

Era Margot, ¿hace cuánto llegó? ¿Cuánto tiempo llevo viendo a la nada?

—Lo siento Margot, estoy un poco distraída, ¿qué sucede?

Margot suelta un largo suspiro y puedo escuchar como susurra para ella misma los números tratando de no volverse loca conmigo. Pobre mujer, tiene que vivir con alguien tan distraído como yo.

—Cariño, he dicho que Mark ha despedido a la fabulosa y gruñona chica que interpretaría a tu fabulosa Rachel Adams.

—¿¡Pero qué dices!? ¿Qué demonios fue lo que sucedió?

—Sucedió que la chica se creía la gran cosa, se molestó porque su maldito guión no era lo que ella quería y trató de manosear más de una vez al pobre Eddy.

—Freddy—corrijo. Pobre chico, tengo que hablar con él.

—Eso es lo que dije—se apresura a decir—.el punto es que Mark la a despedido hace no menos de media hora y ha cambiado los términos del contrato.

La miro alarmada, esto podría ser el fin de mi película y por consecuente de mi vida, nunca obtendré lo más soñado en mi vida.

—¿Cuáles términos?—pregunto cansada. Simplemente termina con esto Margot.

—Dado que es muy poco tiempo el que tenemos como para buscar a una nueva estrellita, Mark quiere que seas tú la que interprete a Rachel Adams.

  ¿¡Pero que demonios!? Estaba completamente segura de que todo aquello era una broma de mal gusto. Había creado a Rachel como una chica perfecta con bonito cuerpo y cabello verdoso, cosa con la que yo no contaba. Después estaba el hecho de que el chico sería interpretado por Alonso por petición mía y capricho del director. Lo cual significaba que Rachel (yo al parecer) tendría que besarse con el chico de ojos azules y ese era..., Alonso. Dios mátame ahora.

—Estas bromeando, ¿cierto?

  Margot me mira durante un largo rato sin decir palabra alguna. Finalmente me sonríe de una manera tan maliciosa que hace que mi cuerpo de estremezca de miedo.

—Sé que te gusta ese chico pelirrojo así que, ¿cuál es el gran problema? Compartirás babas y créditos con él.

  Hago una mueca.

—Haces que suene asqueroso.

—Míralo como quieras verlo cariño, pero necesito una respuesta ahora o Mark se desesperará y todo tú trabajo se irá por la basura.

  Era más que obvio que yo no quería eso. Además, por fin tendría un acercamiento con Alonso incluso aunque fuese ficticio y el no sintiera nada por mi.

—De acuerdo.

  Margot asiente y desaparece dejándome sola en la habitación. ¡Oh por Dios! Besaré a Alonso.

Alcanzar una estrella. (A.V)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora