—¿Te gusta Marcos?.
Dirijo mi mirada hacia Ada quien me mira esperando una respuesta, me tomo un segundo antes de contestar.
—Si—respondo con sinceridad, ella aparta la mirada—.¿Hay algún problema?.
—No ninguno—se apresura a decir—. Solo no quiero que salgas lastimada.
Le sonrió, Ada siempre intentando protegerme recuerdo la vez que le confesé que me gustaba Marcos.
Jade le lanza un cojín a Inés lo que causa que Ada se muera de la risa.
—Oye no es mi culpa que hallas decidido cortarte el cabello—dice Inés entre risas.
—¡Cállate! Mi mamá me obligó—se defiende jade y me mira extrañada—. ¿Y tú qué tienes?.
Las chicas se sientan a mi lado creando un círculo, es algo que solemos hacer, es como nuestro espacio secreto.
—Tengo algo que decirles...
—Ay no— Inés se lleva la mano a la boca y se acerca para susurrar—. No me digas que ya hiciste eso...
Mis ojos se abren con sorpresa y la miro mal.
—¡Apenas tengo trece Inés! Obvio no—ella se encoje de hombros.
—¿Entonces?.
No contesto así que empiezan a murmurar entre ellas.
—Me gusta Marcos—suelto y las tres se quedan en silencio.
—AHHH, no puede ser—grita Inés con emoción.
—¡Alison tiene novio!—empiezan a cantar.
Jade e Inés se levantan y empiezan a saltar. Ruedo los ojos y me fijo en Ada no se ha movido parece como si estuviera en shock, aunque su mirada refleja ¿tristeza?. La tomo de la mano.
—Hey ¿Estás bien?—ella parece reaccionar y me mira—. Si te molesta no hago nada, tu amistad es más importante para mí que un novio.
Ella sacude la cabeza y me regala una sonrisa.
—Estoy tan feliz—me abraza—. Mis dos personas favoritas juntas.
—Aun no sabemos si le gusto—me separó y ella hace una mueca.
—Es algo tan obvio—se levanta y se una a jade e Inés que siguen cantando—.¡Ali tiene novio!.
Me río y me les uno.
—¿Porqué Marcos me haría daño?.
—El no es un chico de relaciones serias, solo juega con las chicas y luego las bota, no quiero que seas una de esas chicas—una sonrisa se forma en sus labios—. Aunque desde que llegaste lo noto diferente, talvez estoy equivocada tu le haces bien.
Nos despedimos y camino hasta mi ex casa, tocó en timbre y diane abre la puerta.
—Oh, hola cariño—me da un corto abrazo de saludo—. Pasa.
La sigo hasta el comedor, todos están sentados en la mesa y escucho un grito.
—¡Anna!—me arrodilló cuando Daniel viene corriendo hacia mi, lo cargo y me abraza—. Te estañe.
—Y yo a ti pequeñín.
Lo abrazo con fuerza y beso un lado de su frente antes de bajarlo cuando me fijo que toda la atención está en mi.
Papá y Adam me ven con una sonrisa, Angie con una mueca de fastidio y Aarón ni siquiera me dirige la mirada.
—Creo que llegue un poco temprano—miro a Diane—, lamento interrumpir los.
—Para nada cariño, siéntate te serviré.
—No, no hace falta—Diane me dirige una de sus miradas que te dicen que no cambiará de opinión—. Si señora como ordene.
Ella se queda mirando me, espera algo que solía hacer, no seas Alison, no seas Alison ¡Es muy difícil!, Ella se repone y me regala una sonrisita triste.
Daniel toma mi mano me lleva a la mesa y se sienta en mis piernas mientras come. Diane me sirve y le agradezco.
—¿Cómo fue tu día?—la pregunta de papá me sorprende.
—Muy bien señor.
—No, no me hagas sentir viejo—se ríe—, puedes tutearme.
Asiento con una sonrisa.
—Bueno, viejo ya estas—Daniel suelta una risita por lo que dijo Adam.
El almuerzo transcurre divertido, como si nada hubiera cambiando, como si todo fuera como antes pero no me dejó llevar por el momento, tengo que pensar en la misión.
Le hago mensajes en el cabello a Daniel que se ha quedado dormido en mi regazo con su cabeza acostada en mi pecho.
—Mas tarde va a venir una chica a ver la moto—comenta papá haciendo que lo mire.
—¿Porqué tendría que ver la moto?—pregunta Aarón.
—Voy a venderla.
No sé si es idea mía o el ambiente se volvió más tenso, Diane parece triste pero no lo contradice, Adam aparta la mirada, Angie no levanta la vista de su plato y Aarón prieta los puños sobre la mesa.
—¿Porqué tendrías que venderla?—murmura Aarón entre dientes.
—Por que a Angie le incómoda que esté aquí—responde—. Además nadie la usa.
Aarón dirige su mirada a Angie y no me gusta lo que veo en ella odio.
—Tenías que ser tú.
—Aaron—advierte papá pero lo ignora.
—¿En qué te afecta que este ahí?—Aaron se ríe —. ¿Qué?, ¿Te recuerda el pasado?—Angie no lo mira en ningún momento.
—Basta, no quiero que me hables así.
—Ella no quería ir pero tú la obligaste—Angie aprieta los labios—.¿Porqué debería importarme lo que tú quieras?—Angie levanta la mirada—. Te jode la culpa ¿verdad?.
Angie se levanta sin decir nada y todos nos quedamos en silencio, papá le da una mirada de regaño.
—¿Estás contento?.
—Si.
Me siento muy incómoda y como si no tuviera que estar aquí así que me cargó a Daniel y me levanto.
—Voy a acostarlo—Adam me asiente agradecido.
En cuanto salgo del comedor escucho los gritos de pala regañando a Aarón, subo acuesto a Daniel y beso su frente.
Escucho como abren la puerta y veo como entra Aarón, cierra la puerta y se sienta en el suelo.
—No debiste hablarle así.
—Se lo merece creeme—responde tranquilo.
—¿Sabes que le duele cuando le hablas así?—le recriminó y el ni se inmuta.
—Lo sé.
Quiero golpearlo, encerio quiero golpearlo pero recuerda no eres Alison.
—Que cínico eres—el se levanta y camino hasta quedar cerca de el—. Ya arruinaste el almuerzo ¿Qué más quieres haces?.
Por un segundo no dice nada y veo como su mirada viaja a mis labios ¿Que está haciendo?.
—Esto.
Me quedo perpleja al ver que se acerca y me besa.
Nota de la autora:
Espero les guste el cap
Besos con sabor a fresa 😘
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ESTOY BIEN
General FictionDicen que uno solo vive una vez. Que una vez que mueres todo se acaba, no hay segundas oportunidades. Pero Alison si la tuvo, la vida le regaló una oportunidad. Pero la cosas no serán tan sencillas