Capítulo 24

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- ¡Yibo allá viene un camión! - Zhan saltaba de emoción mientras aplaudía.

Pero claro que estaría emocionado, luego de dos horas de espera por fin aparece algo por esos rumbos, solo esperaban que no pasen de largo.

- Tranquilo Zhannie - formuló Wang - vamos a hacer la parada...Bueno, parecemos unos vagabundos, espero que no nos tengan miedo - Yibo soltó una risita nerviosa elevando su brazo haciendo la parada, como si fuese un colectivo.

- Estoy nervioso A-Yi, no quiero ser pájaro de mala güero, pero eso parece más una carcacha que un camión~

- Sshhh Zhan Diosss - Yibo no pudo evitar soltar una carcajada, porque era cierto lo que Zhan decía - esa carcacha puede ser nuestra salvación.

Gracias a Dios, el camión estaciono frente a ellos. Ambos suspiraron de alivio.

Era un enorme camión de carga y tal parece que en la parte trasera había ruidos extraños.

- Señor, disculpanos...usted nos podría acercar hasta el centro de Daegu o en un lugar dónde haya alguna comisaría? - el señor escuchaba todo atentamente mientras asentía - nosotros estamos perdidos hace más de un mes en este lugar - mencionó Yibo señalando el gran pantano que se encontraba detrás suyo.

- Piko - dijo el señor con un tono raro de voz.

- No señor, pantano.

El señor sonrió.

- Pejupí katu - dijo apuntando el camión, camino hacía la puerta y la abrió.

Zhan y Yibo se codearon...Al parecer el viejo ese era extranjero y ellos no entendían ni un carajo.

Cuando el señor término de abrir la puerta los ojos del pelinegro y el más bajo salieron de sus cuecas.

¡Aquella parte del camión estaba repleta de gallinas!

- Y-Yibo.

- Tranquilo Zhan vamos a subirnos, las gallinas son inofensivas.

Mientras Yibo hablaba el señor asentía como un boludo. Como si entendiese lo que estaban diciendo.

- Nosotros somos de Beijing señor y usted? Muchas gracias por ayudarnos, creímos que nos íbamos a quedar acá por siempre.

El señor hizo una reverencia y dijo.

- Akã tembos.

Y sin decir más, se dirigió a la cabina.

- Qué mierda dijo ese señor -murmuró Yibo esquivando algunas gallinas, que por lo visto querían embestir contra su rostro.

- No sé cariño, yo no hablo taka taka.

Zhan y Yibo comenzaron a reír... Mientras las gallinas comenzaban a cacarear a la par de ellos.

Las gallinas habían entendido el chiste y se estaban riendo.

Mientras tanto el señor en la cabina iba sonriendo de forma un tanto burlón mientras cantaba una canción llamada "13 tuyuti"

- Te imaginás A-Yi que el señor en realidad sea un secuestrador vendedor de órganos y nosotros somos sus presas - Zhan comenzo a reírse.

- Eso nomás ya falta para poder escribir un libro amor - Yibo comenzo a reírse de igual manera.

- Vos qué decís que nos dijo el señor?

- La verdad que ni puta idea tengo... Yo me subí nomás ya cuando ví que abrió su puerta.

- Jajajaj que loco - sonrió Zhan haciendo que sus ojitos se ocultasen.

Yibo lo miró enternecido, mientras iba acercándose al cuerpo de Zhan en la esquinita, apartado de las gallinas.

Lo toma de la cintura.

- Q-Qué haces A-Yi, las gallinas nos van a ver.

- Y si hacemos pasar el tiempo en cositas interesantes - formuló Yibo llevando sus grandes manos al trasero del más bajito.

- mmgh.

Yibo atrapó de forma hambrienta los labios de Zhan, pero tres segundos después el camión freno de golpe haciendo que ambos cayeran al suelo. Miraron por todos lados a ver por qué el camión había frenado de forma tan brusca.

Todo estaba en orden hasta que se toparon con una ventanilla de vidrio que conectaba con la cabina del camión.

El señor los estaba mirando de forma pervertida. Y luego hizo un gesto para que no hagan cosas así en su camión.

Por lo visto con señas se entendían mejor.

Yibo dirigió su vista hacia Zhan, sólo para darse cuenta que estaba totalmente rojo como un tomate.

- El señor nos pilló, que vergüenza Yibo.

- Íbamos a darle un espectáculo gratis a cambio que nos lleve - se burló Yibo.

Zhan le da un pequeño golpe en su brazo y hace un puchero.

- El iba a ver mi trasero Yibo.

- No no no...Eso sí que no Zhannie, eso sólo lo puedo ver yo.

- Pero si todavía no lo viste - Zhan se burló.

- Pero ya lo toqué muchas veces - soltó Yibo haciendo la cara del niño del oxxo.

- Pervertido.

- Mejor durmamos Zhannie...cuando despertemos ya vamos a llegar. No olvides que te amo mucho.

- Yo te amo más Yibo - dijo Zhan cuando iba a darle un beso.

Pero no pudo ya que justo Yibo comenzo a gritar interrumpiendo aquel momento.

- Y-Yibo? Qué tenés? Qué paso??!

- La gallina me picoteó en las bolas -dijo Yibo dolido, friccionando la zona afectada - creo que tenés que hacerme sana sana Zhannie.

- Vos decís? - dijo un Zhan preocupado.

- Claro que sí! Querés ver? Yo creo que está hasta un poco rojito, querés ver? - dijo el pelinegro haciendo un ademán de bajarse los pantalones.

- ¡Siii digo Nooo Wang! Ponele tu saliva que se yo...cualquier cosa.

- Sos ree malo vos - Yibo le saco la lengua.

- No te hagas el bobo y vamos a dormir A-Yi~

Estúpidas gallinas de mierda. Cuando lleguemos a nuestro destino me los voy a robar y las voy a comer - todo aquello murmuraba Yibo mientras fulminaba a las pobres gallinas con la mirada. Mientras ellas se encontraban con la mirada gacha..

Perdidos en el pantanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora