Sa.yo.na.ra

East Brodway

Me dirigí a Calle 50. El subte de una de las estaciones de trenes,ahí habíamos quedado. Al llegar vi a Caín y Arthur manteniendo una conversación. Me acerque con mí semblante serio y Caín me saludo amablemente. 

-¿Quien eres tú? - pregunto Caín cuando vió bajar a alguien por las escaleras minutos después que yo.

-Es el jefe de los chinos. Niall horan.- respondí cuando volteé a ver de quién se trataba.

-Me recordaste. Estoy halagado. - contestó el rubio haciendo una reverencia.

-¿Cómo supiste que estaríamos aquí? Hice que mis hombres vieran que en el lugar ni una rata existiera - pregunto Caín.

-Subestiman nuestro espionaje. Tengo derecho a observar está pelea,no son los únicos con negocios en los centros. No me quedaré fuera de esto. - respondió Niall cruzando sus brazos.

El chico me agradaba,no pude sentir que tuviera miedo.

- Bien. ¿Que te parece? - me pregunto Caín.

-Como quieras- dije levantando mis hombros.

-Yo digo que no - ordenó Arthur. - Esto no es de tu incumbencia. No quiero extraños husmeando.

-Pobre de mí. ¿Un gran jefe como tú liderando la pandilla más grande del centro,asustado de una ratita como yo?¿O hay una razón por la cual no me quieres aquí? - Dijo Niall casi investigando.

-Es cierto.¿Por qué estas tan nervioso? - siguió Caín.

Arthur sonó su lengua contra sus dientes.

-Bien,no tengo nada que ocultar de todos modos.

-Entonces eso lo resuelve. Denme sus armas - ordenó Caín.

Yo saque mí arma y se la entregué.

-Yo no tengo. No puedo usar algo con un gatillo - dijo Arthur moviendo sus dedos.

-Solo se permiten cuchillos. Nada de trucos sucios. Esto va para los dos. Hagan algo gracioso, y se enfrentarán a nosotros.

Arthur y yo nos separamos caminando de espaldas. Caín y Niall se quedaron a un costado observando con sus brazos cruzados. Y nosotros sacamos los cuchillos.

Rápido Arthur llego a mí, en un movimiento exacto. Me amagó con su mano derecha. Pero su cuchillo no se encontraba ahí.

-¡Izquierda!- grito Niall.

Me moví esquivando las puñaladas de Arthur hacía mí. De pronto presentí que un tren se acercaba. Es imposible,esa línea no funcionaba hasta  mañana en la tarde. Arthur, bastardo.

-¡Tren! ¡Viene un tren!- grite mientras detuve el cuchillo de Arthur contra el mío.-Eres un bastardo- murmuré

Arthur sonrió.

-Es hora de que mueras- dijo y me dio una patada haciendo dar muchos pasos hacia atrás.

El tren se acercó y junto con el,de las ventanas salían las armas de los hombres de adentro.

-¡Cubranse!- grito Caín.

Y todos nos escondimos tras los pilares. Las balas retumbaban en el lugar.

-¡Mantenlo!- ordenó Artur una vez que el tren se detuvo.

-¡Jefe!- dijeron los hombres de Caín bajando por las escaleras.
Inmediatamente fueron polbarizados.

-¡No hay que tener miedo. Está desarmado! - decían los hombres mientras salían del tren.

-¡Harry,toma esto!- grito Niall lanzandome mi arma.
La tomé en el aire y de inmediato mate a los que me estaban rodeando.