Capitulo 7.

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Tini's POV

-¡En que no puedo más! - le grité exaltada.

-¡No puedes aparecerte frente a ellos y decir: "Hola, Jorge. Vengo a ver a mis hijos"! - me gritó de vuelta Diego.

-¡Necesito verlos! - mis ojos comenzaban a arder por las lágrimas que se aproximaban. - Necesito hablar con él.

Mire a Diego a los ojos y pude ver enojo.

-¡¿Hablar con él?! - pe preguntó y me tomó de las muñecas jalándome hacia él.

-Me lastimas. - le susurré al sentir el ardor en sus agarre.

El me soltó y me aventó contra el muro de la habitación. Después de eso se acercó a mí.

-Yo... perdóname, solo que siento celos al saber que aún lo amas. - trato de tocarme pero me alejé de él.

-Solo quiero estar sola. - le dije con cierto rencor. - Y más te vale no intentar detenerme en lo que haré o no dudaré en matarte.

El solo me miró sorprendido y se fue de mi habitación cerrando la puerta de golpe.

Desde que me descubrió en la casa de Jorge apunto de hablarle, hemos estado discutiendo desde entonces.

Ahora solo faltaba saber dónde estaba Jorge y para eso revisaría el GPS de su celular.

No tarde más de 10 minutos en averiguarlo. Se encontraba en un parque cerca de donde solía jugar cuando niña.

Iría a verlo justo a hora. Tome mis cosas y salí de la habitación del hotel. Baje por el elevador más cercano y al llegar a la recepción deje las llaves encargadas y tomé la camioneta.

Hoy sería el día en que por fin hablaría con ellos.

Diego's POV.

Iba a ir a su habitación para poder hablar con ella y disculparme por lo que hice. Toque tres veces la puerta y nadie habría.

Tome una llave que había pedido en recepción y entre a su habitación. Ella había dejado su computadora abierta con una ubicación. Estaba seguro que era Jorge.

No dude ni un minuto y marque un número telefónico.

-Espero y sea importante. - me dijo la voz del otro lado de la línea.

-Ella se fue a buscarlo. Y sé a dónde se dirige. - hable algo molesto. - ¿quieres que la detenga?

-No. - se escuchó que reía. - solo vigílala de lejos. Y después me informaras, entre ellos se mataran.

-Está bien, Antonia. - colgué la llamada para dirigirme a ver el espectáculo que se aproximará.

Tini's POV.

Estaba tan cerca, solo me faltaban unos minutos más para llegar. Solo espero que cuando mis hijos me vean me reciban con un fuerte abrazo y Jorge que quiera al igual que antes. Haría todo lo posible para que el me amara de nuevo.

Al llegar al parque bajé de la camioneta y vi que solo estaba el auto de Jorge. Suponía que estarían cerca del lago. Camine emocionada por verlos y poder abrazarlos. Pude ver el cuerpo de Jorge dándome la espalda y acomodando todo para un picnic. Estaban debajo de un árbol frondoso. No podía ver más allá de el por la sombra.

Al irme acercando un poco más logre divisar a Martinita y Jorgito jugando a las atrapadas. Cuando ella me vio, tomó a Jorgito de la mano. Pensé que lo traería hacia mí pero se lo llevó con su padre.

-¡Jorge! - grité y el de inmediato se tensó y giró a verme. Su expresión era de espanto y enojo.

Martinita y Jorgito se fueron a esconder tras otra persona que se encontraba ahí, la cual vi que se acercaba y al divisarla bien, observé que era idéntica a mí, pero con otra forma de vestir.

-Tu... tu estas muerta. - podía notar algo de sorpresa ene l tono de voz de Jorge.

-Te dije que la había visto, papi. - murmuró Martinita.

-Yo... Yo puedo explicarte todo. - traté de acercarme más a él, pero rápidamente todos retrocedieron. - Me tuve que hacer pasar por muerta porque...

-Claro. - me interrumpió Jorge. - como no me sorprende, eso es lo que siempre haces. Es tu manera de escapar. - él estaba muy molesto.

-¿Qué haces aquí? ¿A qué viniste? - me preguntó esa chica con cierto enojo en la voz.

-¡Tú no te metas! - le grité

-¡A Violetta no le gritas! - Jorge me exigió.

-¿La estas defendiendo? - pregunté sorprendida.

-Por supuesto que sí. - alzó los brazos para luego bajarlos con fuerza. - Ella es la única persona que desde que volviste a huir me ha estado apoyando. En cambio tú. - me señalo. - no eres más que una vergüenza para mis hijos.

No podía creer lo que estaba escuchando.

-Yo tengo mis motivos. - comenté sollozado.

-¿Qué es más importante que tu familia? - Me preguntó Violetta - ¡Oh! Olvidaba que te hiciste pasar por muerta, así que para ellos lo estas.

Decidí pasar de largo ese comentario y miré a Martinita.

-Cariño, Ven con mami. - ella tomó la mano de Jorge.

-Papi, yo solo quiero tener un hermoso picnic con mi mami y contigo. - sonreí triunfante. - Por eso quiero que Martina Stoessel se vaya. - Pude ver la sonrisa que Violetta tenía y el enojo con el que mi hija me veía.

-¡Sí que se vaya! - gritó Jorgito haciendo como si me lanzara algo.

En ese comento sentí un dolor muy fuerte en el pecho. Ella me odiaba. Ellos me odiaban.

-Puedes irte y dejarme tener un hermoso día de campo con mis hijos y mi prometida. - Jorge abrazó por los hombros a Violetta y acercó a mis hijos a él.

"Prometida" esa palabra bastó para que mi mundo se derrumbara completamente.

Comenzaron a correr las lágrimas en mi rostro. Me di la media vuelta y corrí hacia la camioneta con la que había llegado. Al subir a ella comencé a golpear el volante con mucha fuerza.

Los había perdido y sería muy difícil recuperar los.


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