Hoy y Siempre ✈️ (Jace Norman)

Capítulo 16

Horas antes...

Narra Jace

Finalmente, Nueva York.

Estaba agotado. Los cambios de horario me agotan, los vuelos me agotan, la situación me agota, pensar simplemente que todo va a salir mal me agota.

Estando tan sumido en mi mismo y en intentar inventar algo que decirle, me desubiqué y le dije, inconscientemente, al taxista la dirección del departamento de Jade.

En ese momento, me parecía un lugar lógico, porque recordaba que me había dicho que estaba pago hasta fin de año.

"Perdóname", "Lamento pensar que no me amas. A veces, las palabras son lo único que logro entender", "Sé que me amas y sabes que te amo. No tienes que decírmelo más si no quieres", "Solo vuelve conmigo, por favor. No volveré a cometer un error así de grave otra vez. Lo prometo".

No sabía cual de todas esas oraciones sonaba peor. El simple hecho de reclamarle no amarme era suficiente razón para que nunca volviera a estar conmigo. Y me dolía entender que tenía todo el derecho a no hacerlo.

Antes de darme cuenta, ya estaba frente a su departamento. Vi luz por debajo de la puerta y supe que estaba ahí.

-Por lo que más quieras, rómpeme la cara, pero perdóname- dije en un tono bajo.

Toqué la puerta. Escuché pasos hasta esta y se abrió de a poco.

Con esa sonrisa sarcástica que solo él tenía, apoyó su antebrazo en el marco y me miró de arriba a abajo.

-Hola, rubio- esa voz estúpida, insoportable de gracioso que seguro no le hacía gracia a nadie.

Todo se me fue al piso. La voluntad de pedir perdón, el nerviosismo, la poca esperanza que tenía. Esas emociones fueron reemplazadas por, simplemente, ira y un poco de tristeza.

Claro que vino con él, claro que ya están más que felices sin mi, claro que seguro ya están planeando su boda.

Howard estaba distinto, un distinto que seguro a Jade la volvería loca.

-No tengo tiempo para tus juegos- solté molesto- Déjame hablar con Jade.

-Oh... Si...- No lo mates, no lo mates. Harás todo aún peor si es eso posible- Me encantaría ayudarte, pero... Jade no está aquí- completó con ese tono de burla- Pero si quieres yo puedo partirte la cara- lo miré confundido y enojado a la vez- Hablas más alto de lo que imaginas- aclaró.

-Howard... Muévete- no tengo ni un gramo de paciencia con este chico.

-No- contestó sacando el antebrazo del marco- Es mi departamento ahora y no se aceptan rubios falsos, tóxicos y egoístas.

¿En serio me quería hacer creer que Jade no estaba con esa información que, claramente, alguien le dijo?

-Howard, no te metas en mi relación con...

-¿Cuál relación?- interrupió. Se volvió serio de un segundo a otro. Lo admito, ese Howard, daba miedo- ¿La que rompiste y tiraste a la basura?

-¡No hables por ella!- exclamé- ¡Déjame entrar!

-¡Jade no está aquí!

-¿Howard, qué pasa?- se escuchó una voz de adentro y ambos nos callamos.

Lo miré sabiendo que había ganado esta vez.

-Esa no es Jade.

Di un paso adelante y lo saqué del camino para entrar. Sabía que no sería lo suficientemente fuerte para detenerme.

Paré en seco. Una chica rubia de ojos verdes estaba cerca de la isla de la cocina confundida. Era... linda.

Escuché la puerta cerrarse.

-Alex, Jace. Jace, Alex- escuché a Howard acercándose a mi lado- Te acercas a dos metros de ella y te juro que te caerás "accidentalmente" por aquel balcón- agregó susurrando cerca de mi oído.

-¿Dónde está Jade?- le pregunté.

-Salió con sus amigas- respondió- ¿Sabes dónde? ¡No en este departamento! ¡Así que, vete!

Me agarró de la ropa y empezó llevarme hasta la puerta.

-Espera...- escuché a la chica otra vez y Howard se detuvo. Wow, quiero ese poder para manejarlo. Ella se acercó un poco a los dos- ¿Eres novio de Jade?- me preguntó.

-Podría decirse- contesté- Tuvimos una gran pelea.

-¿No puedes ayudarlo?- cuestionó Alex en dirección a Howard esta vez- Tu estuviste con Jade, quizás puedas darle un consejo, Howie.

Solté una risa. La primer risa que soltaba en días. Dios, como voy a molestarlo a... Howie.

Él me soltó con un leve empujón y suspiró.

-Él es la razón de que las cosas no funcionaran- confesó- Además... me cae increíblemente mal.

-Mira, Howard...- empecé serio y tranquilo por primera vez desde que le hablaba- Entiendo nuestras diferencias, entiendo que me odies. Si te hace sentir mejor, aún me generabas inseguridad en Los Ángeles. Pero amo a Jade más que a nada y sé que tú también- expliqué- ¿Puedes, por favor ayudarme?