Creare 창조 [LayHo] [TERMINADA]

06

—¿En dónde estamos ahora?

La voz de SeHun comienza a irritar al Sanador, al igual que el poseedor de Viento, no tiene idea de a dónde los ha mandado su protector. Así han viajado durante unos meses, sin noticias de que el Creador esté cerca de ellos.

Una noche están en las maravillas de España y a la mañana siguiente deben apurar sus pasos a través de Venezuela. Los ha mandado a las frías mañanas de Rusia y al día siguiente están en el calor de África. Y en ninguno de esos lugares está su gran amor.

¿Cómo estará JunMyeon?, se pregunta el Sanador cada vez que siente a su protector vibrar, ojalá esté en mejores condiciones que ellos. Han tenido que hacer malabares para sobrevivir a un frío y al calor, para comer algo mientras caminan descalzos y a veces algunas personas son bondadosas y les ofrecen alimento y prendas.

Recuerda cada noche las facciones hermosas del Creador, su sonrisa y sus mejillas sonrojándose, se imagina tomando de la mano a JunMyeon, el sonido de su risa y las muecas que a veces el creador hacía. Extraña los pucheros tiernos y los berrinches que hacía cada que el Sanador debía regresar a su castillo.

Como extraña todo de JunMyeon.

Cuando SeHun duerme y no está su chillona voz reclamando que su protector no sabe a dónde ir, Yixing camina hasta quedarse solo con sus pensamientos y anhelos, saca la piedra del protector y con un enorme amor invoca al animal, esperando que lo reconforte como lo ha hecho durante los últimos meses.

—¿Crees que JunMyeon está bien?

Pregunta al gran pez beta azul frente a él, con un movimiento de su cola, el gran protector afirma ante la pregunta. Yixing sonríe y una ráfaga de viento con pequeñas gotas de agua acarician su rostro, ese es el ánimo que espera del gran protector, esos toquecitos que le devuelven la esperanza de encontrar a JunMyeon.

Volviendo en sus pasos y habiendo guardado al protector, Yixing camina de nuevo a donde dejó a SeHun dormido, se sorprende cuando el Poseedor del Viento platica con emoción directo a una gran mantarraya que desprende algunos rayos a su alrededor. Al verse descubierto, SeHun pide a su protector volver a la linda piedra blanca con destellos amarillos, enseguida el Poseedor del Viento guarda su preciada piedra Citrino en uno de sus bolsillos.

Ninguno menciona nada, Yixing termina de llegar al lugar y se sienta a un lado de SeHun, el último cree que ha sido descubierto en un crimen y no sabe qué decir en realidad. ¿Debería contarle a su Príncipe la verdad?

—¿JongDae es un buen chico?

Es lo único que atina a decir Yixing, el Poseedor del Viento respinga en su lugar y con una sonrisa tímida asiente.

—Nos conocimos en una de las festividades de la Aldea del Viento, al principio nuestros poderes hacían estragos en donde sea que estuviéramos éramos un caos —con confianza, el Poseedor del viento se desenvolvió—, cuando decidimos que nuestros sentimientos eran mutuos, nos compartimos las piedras de nuestros protectores, eso fue justo un par de semanas antes de que su padre, el Rey, nos llamara a esta misión.

—Lo lamento —Yixing baja la mirada a sus pies, SeHun no entiende muy bien de qué se disculpa su príncipe—, lamento que tengas que venir a hacerme compañía mientras el amor de tu vida está cuidando de mi grande amor.

SeHun niega con una sonrisa y se permite soltar una risa ligera.

—Antes de iniciar este viaje, ambos vimos esta oportunidad para saber si nuestro amor es de verdad, buscarnos a nuestro modo. Sé que su protector lo está llevando con el Creador JunMyeon, pero también mi protector me está llevando con mi gran amor.