Mi Lindo Narco [ArMario]

Capítulo UNO.

Era una linda mañana y por los pasillos de una gran mansión andaba un joven guapo azabache, portaba lentes y un traje negro que lo hacía ver más sexi de lo que era.

Aquel joven era nada más que Armando Mendoza Sáenz, era el hijo de Roberto Mendoza y Margarita Sáenz de Mendoza, dos reconocidos narcotraficantes de Colombia.

Ellos eran los que tenían el control del gobierno y de todos los recursos de país, a veces hacen tratos con algunas personas comunes y corrientes para prestarles insumos e incluso dinero pero como saben, si no pagan ellos mismos toman sus vidas como pagos.

Hoy no era la excepción, paso por la sala para bajar al sótano en donde estaban sus compañeros "hablando" con sus deudores.

--- ¡Te estoy hablando sabandija! --- lo golpeó al pobre infeliz tirado en el piso.

--- ¿Ya le sacaron algo al imbécil? --- entro al lugar el líder del grupo.

--- Ni señor, no quiere decirnos dónde está esa sabandija de Calderón --- pateo al que estaba en el piso y este se quejo.

--- Y...Yo n...no s...se do...donde es...está --- escupió sangre el susodicho.

--- No nos hagas perder el tiempo, ¿Quieres que tus hijos y esposa paguen tu falta de cooperación? --- le pregunto directamente el líder.

--- N...No, por...favor, no las...lastimen a mi familia --- se apanico, pero tampoco quería traicionar a su amigo.

--- Si no quieres que lastimemos a tu familia, dinos dónde se encuentra Luis Calderón --- fue un poco amable el líder.

--- Lo siento mucho amigo --- susurro y de dispuso a hablar ---, está en... --- no pudo terminar porque lo mataron justo frente a los ojos del líder.

--- ¿Pero que...? --- miro detrás de él y le gruño al implicado ---, ¿Qué crees que haces Valencia?, ¿Por qué carajos asesinaste a mi prisionero? --- le dijo con suma molestia.

--- Lo siento Armando, pero no le veía el caso saber dónde está ese tipo, es una perdida de tiempo --- le dijo guardando su arma.

--- Mire Daniel Valencia, usted estará acá gracias a mi padre, pero no olvide que usted solo es un empleado más aquí, ¿Me oyó? --- le dijo bastante enojado, pero ya no podía revivir a su prisionero.

--- ¿Qué hacemos ahora con el cuerpo señor? --- le pregunto uno de sus subordinados.

--- Que más idiota, saquelo de aquí y botenlo en algún lado sin que nadie los vea --- dijo y tocó sus sienes estresado.

Los demás asintieron y sacaron el cadáver del sótano, mientras eso pasaba uno de los subordinados revisaba la cartera del tipo y en ella encontró algo que ayudaría con la búsqueda.

--- Señor, encontre algo en la cartera del tipo --- se la extendió y Armando la tomo entre sus manos, todo esto frente a Daniel quien tenía el ceño fruncido.

Armando la reviso y sonrió al ver qué era lo que estaba buscando, parecía que el tipo iba a traicionar a su "mejor amigo".

--- Bien hecho, sal de aquí, tengo que hablar con Valencia a solas --- le dijo y este salió de inmediato.

Hubo un silencio muy incómodo pero fue Armando quien rompió eso con una pregunta hacía Daniel.

--- Dime algo Danielito --- camino a un lado de este sin mirarlo aún ---, ¿Estás haciendo esto para llamar mi atención de nuevo? --- le pregunto de golpe mientras le daba la espalda.