Cada persona tiene su pequeño universo, algunos más grandes que otros. Hay ocasiones en las que la valentía nos impulsa a hacer ese pequeño universo más grande.
A veces tan solo necesitamos un pequeño empujoncito para abrir nuestros horizontes y da...
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Jungkook veía a su amigo decaído, le tenía un especial cariño a Namjoon porque había sido su primer y único amigo durante mucho tiempo. No le gustaba cuando Seokjin lo rechazaba de manera tan fea, pero también entendía a Seokjin, simplemente para ellos era difícil entender que podían gustarle a alguien de manera honesta y sin segundas intenciones.
Pero ese día había decidido llevarlo a la cafetería, buscaría a Jimin y Taehyung para que pudieran conocerlo, seguro les caería bien y ayudaría a distraerlo un poco.
— ¡Hola Taehyung, Jimin! – saludó Jungkook llegando con su bandeja de comida – Miren a quién traigo aquí – señalo a sus espaldas
— Hola, soy Kim Namjoon – se presentó
— Soy Park Jimin – se presentó el de mejillas regordetas
— Yo soy Kim Taehyung – saludó el otro con entusiasmo
— Vaya, es sorprendente que Jungkook me presente amigos nuevos, usualmente solo habla conmigo hasta quedarse dormido – bromeó haciendo reír a los dos chicos
— Entiendo eso, también hablaba mucho cuando nos encontrábamos en el salón de agua – asintió Taehyung divertido
— ¡Oigan no se burlen! – reprochó con un puchero
Entre los cuatro continuaron hablando de varios temas, principalmente burlándose de Jungkook. Pero a Jungkook no le importaba si se burlaban de él, lo importante era haber distraído a su amigo y lo había logrado, eso le alegraba.
Por su parte, Seokjin caminaba apurado hacia su habitación, llevaba comida para él y para Yoongi. A ninguno de los dos les gustaban las multitudes, así que la mayoría del tiempo comía en su habitación, pero era un poco desgastante, caminar desde el edificio principal hacia el edificio donde estaban los dormitorios, todos los días, tres veces al día.
Ese día había sido uno malo para él mismo, en las primeras horas había logrado entablar una conversación agradable con un par de chicas, le habían caído bien y pensaba que podrían ayudarse en las clases que tenían juntos.
Pero todo su esfuerzo se había ido al caño cuando su profesor le había pedido una demostración. Claro que el profesor no tenía miedo de enamorarse porque era lo suficientemente fuerte como para resistir además tenía una mascarilla especializada. Pero todos los demás no tenían algo así, inevitablemente cayeron hipnotizados por él después de oler las flores, las chicas con las que había hablado de pronto lo observaron diferente. Todos en la habitación comenzaron a tratarlo con más amabilidad, incluso intentaban facilitarle las cosas, algo que le molestaba enormemente.
Además estaba Namjoon, su más fiel pretendiente, quien seguía ahí a pesar de los constantes rechazos. No sabía si realmente Namjoon no era afectado por su aroma o si realmente estaba siendo manipulado. Le daba miedo aceptarlo para luego conocer la horrible verdad.
