Cada persona tiene su pequeño universo, algunos más grandes que otros. Hay ocasiones en las que la valentía nos impulsa a hacer ese pequeño universo más grande.
A veces tan solo necesitamos un pequeño empujoncito para abrir nuestros horizontes y da...
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Después de haber cenado, todos bajaron nuevamente al sótano, la matriarca Jung sabía que estaban haciendo algo raro, sabía que ocultaban algo pero no podía, ni quería intervenir. Jamás había visto a su hijo tan feliz como en esas últimas semanas con aquellos jóvenes, así que los dejaría libres y solamente vigilaría que no se hicieran daño en el proceso.
Todos se acomodaron alrededor de la mesa, prendieron unas cuantas velas e incluso el incienso, nada más un poco para que no se ahogaran en el proceso. Aún un poco nervioso, Yoongi coloco su grimorio en el centro de la mesa, no estaría lejos de él por lo que estaría bien.
— Entonces tomemos nuestras manos y comenzaré a concentrarme – explicó Jimin tomando las manos de Yoongi y Taehyung, a quienes tenía al lado
Pasaron un rato simplemente esperando a que algo pasara, cuando estaban pensando en preguntarle a Jimin si algo estaba mal, este simplemente abrió los ojos mostrándolos de un color plata bastante llamativo, uno más brillante que los ojos de Hoseok durante la noche.
Después de un rato, del grimorio salió lo que parecía una persona. Un hombre bastante parecido a Yoongi pero algunos años mayor, se presentó ante ellos y todos se sorprendieron.
— Yoongi será guapo – murmuró Jimin pero fue escuchado por Yoongi haciéndolo sonrojar
— ¿Jimin? – cuestionó Yoongi
— Oh – soltó volviendo en sí, soltando las manos de Taehyung y Yoongi – Hola, soy Park Jimin. Te hemos llamado porque te sigues aferrando a este grimorio ¿puedes decirnos por qué? También tu nombre – pidió
Los demás chicos se acomodaron detrás de Jimin, Yoongi y Taehyung, de esa manera podrían ver mejor al espíritu con el que estaban hablando y sí, el hombre parecía ser Yoongi pero mayor.
— Mi nombre es Min Yoondae – se presentó – Yo quiero que alguien sepa la verdad de lo que paso en la guerra mágica, quiero que dejen de pensar en mi familia como traidores, y sobre todo, quiero que se sepa quiénes fueron los verdaderos culpables
— ¿Tú eres uno de mis ancestros? – cuestionó Yoongi impresionado
— Sí – asintió con una pequeña sonrisa – Es bueno ver que aún hay personas con la sangre Min, ya que tienes el grimorio, supongo que puedes abrir la puerta ¿no es así?
— Sí – asintió – Aunque no lo supe hasta hace poco
— Lo siento, me temo que fue mi culpa el que te hayas separado de tus padres a temprana edad – suspiró
