- ,, 🦋 [ 𝑹𝒆𝒇𝒍𝒆𝒄𝒕𝒊𝒐𝒏 ]⌇·˚ ༘ | Jujutsu Kaisen Oc

𝟎𝟏 - 𝐀𝐪𝐮𝐞𝐥𝐥𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐛𝐮𝐬𝐜𝐚𝐛𝐚𝐧

ੈ ✩‧₊ Sempiterno 

Que durará siempre; que, habiendo tenido un principio, no tendrá fin.

❪ ;; ❜❜ 🦋 ੭ ⁾⁾

 — Esa camisa es demasiado aburrida, empaca algo más colorido que no solo sea negro.

 La joven observaba sentada desde la cama del contrario, con cierto aburrimiento, como su compañero de clase guardaba un par de prendas en la mochila que se encontraba justo al lado de ella, a Fushiguro le esperaba una misión de un par de días que se le había asignado a su clase, en la que, casualmente, solo había dos estudiantes: ellos dos, la escuela preparatoria de hechicería de Tokio estaba repleta de casos especiales, personas cuyas capacidades estaban por encima de las de una persona común y corriente, personas capaces de ver a las maldiciones y de poder manipular la energía maldita que emanaba de sus cuerpos. Pero para su desgracia (o al menos ella así lo veía) la de cabello bicolor había corrido con la mala suerte de haberse lesionado el brazo dos semanas antes ayudando en una misión a su profesor, que a la vez era también nada más y nada menos que su hermano mayor. Por lo tanto, Fushiguro era esta vez el encargado de llevar a cabo la misión sin la encantadora presencia de su amiga.

— Si llevas solo el uniforme, le quitas lo divertido a salir de viaje.— mencionó sacando de la mochila la chaqueta del contrario, chaqueta la cual se la arrebato al instante para volver a guardarla en su lugar. 

— No voy a ir de vacaciones, tengo trabajo que hacer en Sendai y claramente no es pasearme como tú.— aquel comentario provoco que Gojo soltara un bufido molesta dejándose caer en la cama de él junto con su gata Artemis. 

 Megumi solo negó con la cabeza dejando la mochila con su equipaje en algún rincón de habitación para que ella no le sacara nada de esta e intentara meter alguno de sus conjuntos extraño, desde pequeño estaba bastante familiarizado (malamente) a que la de cabellos negros y blancos irrumpiera en su cuarto como si fuera el de ella, haciendo y deshaciendo cualquier cosa que el chico tuviera en su cuarto. El principal delito que se cometía en la habitación de Megumi cada que Aeri cruzaba aquella puerta era alterar el meticuloso orden que el chico tiene, generando que en más de una ocasión se haya llevado un regaño por parte de él. 

 — Al menos tráeme algo de Sendai, grosero igualado.— comento sentándose de nueva manera en la cama del pelinegro con su gata recostada en sus piernas, la felina soltó un leve ronroneo indicándole a su dueña que la acariciara con su mano sana.— No puedo creer que me vaya a quedar completamente sola en los dormitorios, ni siquiera Kosei está. Me voy a morir de aburrimiento. 

 — En eso te equivocas mariposita. 

 La presencia del adulto recostado en el marco acaparó la atención de ambos estudiantes, aunque se trataba más bien de una atención con una cucharada enorme de molestia por parte de Fushiguro, no le gustaba que su profesor ingresara a su cuarto de sea manera sin avisar, solo a la chica le tenía cierta tolerancia en ese aspecto.