- ,, 🦋 [ 𝑹𝒆𝒇𝒍𝒆𝒄𝒕𝒊𝒐𝒏 ]⌇·˚ ༘ | Jujutsu Kaisen Oc

𝟏𝟒 - 𝐍𝐨 𝐬𝐞𝐚𝐬 𝐜𝐨𝐝𝐢𝐜𝐢𝐨𝐬𝐚

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Sus pies frenaron en seco al ver la escena de Megumi en medio del río, Maki en los brazos de Todou e Itadori preparándose para enfrentar a lo que parecía ser un posible grado especial. Sus iris cristalinas se clavaron con cierta preocupación en las cuencas oceánicas del azabache, la sangre que se resbalaba con sutileza de los bordes de los labios de él y la rama aparentaba nacer desde su abdomen la alarmaron. Le empezaba a parecer común este año escolar que Megumi resultara ser la damisela en apuros siendo salvado por alguien más mientras ella era ese personaje extra de fondo que solo recitaba alguna frase estúpida que lograba hacer reír (o irritar) a los espectadores en un momento de tensión.

─ Llegas tarde, Ayato.─ mencionó Aoi arrastrando los pies dentro el agua hasta acercarse al grupo de hechiceros recién llegados.─ Mini Gojo.

─ Y el increíble Elián.─ sacudió sus manos de manera exagerada, pero solo resultó ser ignorado por todos los presentes.

La presencia del azabache de tercer año imponía demasiado, tal vez se debía a su altura o a su exagerada musculatura, o tal vez solo se debía a sus toscas facciones fasciales; pero nada imponía más que la maldición detrás de ellos que permanecía quieta, observándolos, no era una buena señal.

Fushiguro trató de articular unas palabras en señal de advertencia hacia el peli rosado, pero el inminente dolor en su abdomen le impidió concretar una oración congruente y en su lugar solo terminó tosiendo. El castaño se acercó rápidamente a verificar el estado de su compañero de primer año mientras los otros tres más alto permanecían de pie sin decir algo, hasta que Todou se acercó quedando enfrente de ellos para depositar a Maki en los brazos de Elián.

─ Saquen a estos dos del velo.

─ Según Satoru el velo lo repele solo a él hasta el momento.─ comento el azabache con mechón albino.─ Los demás podemos entrar y salir sin aparente problema.

La semi albina mostraba cierta inconformidad al no ser el centro de atención en aquella situación, a esto sumándole el hecho de que su oportunidad de demostrar su potencial como hechicera frente a su hermano mayor, se había perdido.

─ ¡Esperen! Ni siquiera tú...

Las palabras de Megumi se quedaron atrapadas en el aire al ser interrumpidas por aquella persona que hasta el momento no había dicho algo.

─ Fushiguro, tranquilo.

La sonrisa sincera de Itadori provocó cierta angustia y alivio en el contrario, pero solo consiguió que el estómago de la Gojo se revolviera más.

─ Ya oíste al niño, vámonos.─ se apresuró a pasar uno de los brazos de Megumi por encima de su hombro, al mismo tiempo que Ayato hacía lo mismo con su otro brazo.─ Entre más pronto salgamos, más rápido se acaba esta pesadilla.

─ ¡Si vuelves a morir, te mato!

─ Ya vámonos.─ soltó Mikawa en murmullo molesto.

El camino por el bosque para salir del velo se tornó silencioso, al principio intercambiaron un par de palabras sobre lo que estaba ocurriendo, pero después de eso ninguno de los seis se atrevió a decir algo más. O al menos hasta que cierto peli rosado se atrevió a abrir la boca con su comentario.