Cuéntales - Pearce Joza y tú

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— Cambia esa cara, Pearce. —me dijo Milo.— Parece que llevas mucho tiempo con... pena.

— Esto no es fácil. —admití, mientras dejaba caer mi cabeza en la mesa.

— Es el horrible consejo que te dio Matt, ¿no?

— Oye, yo solo quería ayudar. Lo hablé con Chandler, y dijo que nunca pensó que yo diría algo tan maduro. Está muy orgullosa de mi.

— ¿En serio dijo eso?

— Bueno, no. Pero sí dijo que fue muy maduro.

— No es eso. —dije interrumpiendo a Matt y Milo.— Extraño a Lexi.

— ¿Pero funcionó, o no? —me preguntó Matt.

— Supongo que... no lo sé. No puedo. —dije golpeándo mi cabeza, otra vez.

Sí dejé de escribirle, pero... no podía hacer más. Cada vez que podía, revisaba las fotos o videos que tenía de ella; volvía a escuchar los audios que me mandaba; ... solo me quedaba mirando una foto de ella, mientras pensaba en lo mucho que la extrañaba.
Durante cada segundo del día, ella estaba en mi mente.
Lo único que salió bien de esto, era que los fans creían que habíamos terminado. Así que... cada vez veía menos videos o fotos de ella, en las cuentas de fans. Odiaba que Matthew tuviera... razón... en parte.

— Se supone que este tiempo es para que te ocupes de ti mismo. No para que actúes como si hubieran terminado.

— Yo digo... que Joza no está listo para esto.

— Hace un segundo dijiste que fue una idea horrible. —dije sin moverme.

— Sí Chandler está de acuerdo, debe ser un buen consejo. Hagamos algo. Pearce debe despejar la mente. Y nosotros lo ayudaremos.

— No creo que funcione.

— Hay que tratar, hermano. Por el bien de... Creo que aún no hay nombre de pareja para ustedes. Hay que decirle a los demás para buscarles uno.

— No quiero. —dije sin moverme.

— Vamos, deprimido. Hazlo por tu chica, hazlo por Alexa.

Todo por mi niña.

— Bien. Pero más les vale que funcione. No quiero perder a mi Lexi.