Tienda de animales

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—¡Kazutora!

Gritaron todos al unisono haciendo que se espantara el mencionado por los gritos y las inesperadas visitas. Tanto fue la sorpresa que soltó la toalla, ha estar asustado, provocando que todos los de la sala gritaran.

Baji asustado de que viera Mikey, le tapo rápido los ojos, haciendo que diera un bufido el otro, el quiere ver, y bueno Takemichi:

—¡No! ¡Mis ojos! — No pudo aguantar haber tenido que ver algo tan grotesco.

Está situación causaba varias reacciones; Mikey estaba enojado porque él quería ver a Kazutora como lo trajeron al mundo, Baji se sorprendió a ver lo grande que era la "herramienta" se sentía humillado a ser el suyo más pequeño, Takemichi estaba totalmente traumado y Kazutora a sorpresa de todos no estaba nada avergonzado, a causarle bastante gracia la situación.

—Como sino lo hubieras visto antes Takemichi. — Sin ninguna pena se agachó, levantando la toalla.

—¡Te recuerdo que no fue por mi voluntad!

Si fuera por el jamás hubiera visto "eso" por su voluntad, pero como de niños los obligaban a bañarse juntos no podía hacer mucho y menos con solo cuatro años de edad.

Este comentario desconcentro a Mikey y Baji. Ahora que lo piensan ¿qué hace Kazutora semidesnudo en el departamento de Takemichi? Después de pensarlo un rato llegaron a una conclusión.

Esos dos eran pareja.

—Vaya Takemichi parece que comes muy bien.

En ese momento Baji le tuvo algo de envidia a Takemichi, a ver el cuerpo tan marcado de Kazutora, el también quería comer así.

Takemichi ha escuchar se puso entre rojo y morado, mientras que a Kazutora no le tomo mayor importancia al comentario.

—¡Claro que no, tremendo idiota! ¡Somos hermanos! — Grito tan fuerte que sintió que se le fue el aire.

—Oh~ — Dijieron al mismo tiempo Mikey y Baji.

Al menos eso había aclarado sus dudas y la posible muerte de Takemichi por parte de Mikey, al haberle quitado a Kazutora.

—Si es mi hermanito. — Se acercó a ellos, sentándose en la silla entre Mikey y Takemichi, poniendo sus brazos en los hombros de su hermano, acercando más a él, comenzando a revolver el cabello a Takemichi.

—¡Hey suéltame! — Intento zafarse, algo que no consiguió por lo fuerte que era su hermano. Le iba a dar un golpe para que se alejara, pero algo hizo que se le pusiera verde la cara. — ¡Puedes irte a cambiar, no quiero verte desnudo!

Para mala suerte de Takemichi, Kazutora aún no se ponía del todo bien la toalla. Mikey al escuchar que Kazutora aún seguía sin la toalla, rápido apartó las manos de Baji que aún seguían en sus ojos, lamentablemente cuando descubrió sus ojos ya se había puesto la toalla, lo que hizo que hiciera un pequeño puchero, del que no se dieron cuenta los demás, a excepción de Baji.

—Eres un perverso Mikey.

Hizo un sonido de desaprobación. A pesar de que su amigo tenía una cara de un angelito era un completo pervertido.

—Mira quien habla.

Le molestó lo que dijo, no porque le haya dicho pervertido, ya que el si lo era, y lo aceptaba a toda honra, lo que le molestó fue que Baji diera ese sonido de desaprobación, como si él fuera un niño inocente, cuando en realidad es más perverso que el.

Baji y Mikey iniciaron una pequeña discusión entre susurros de quién era él más sucio entre ellos dos. Por otra parte Kazutora escuchaba los reclamos de Takemichi, que le gritaba por estar semidesnudo en la sala y más cuando habían visitas. Después de un tiempo se canso de los gritos de Takemichi, volteando la mirada hacia los invitados.

Un beso.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora