¿Alguna vez has amado con todo tu corazón? ¿Hubo siquiera un momento donde pensaste que si esa persona te dejaba, ibas a morir?
Mentiras, mentiras que te hace creer el corazón, o tal vez puede que sean verdades.
La mirada es el reflejo del alma por...
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Solo hay dos momentos en que quiero estar contigo: Ahora y para Siempre.
- Anónimo.
30 de junio del 2018.
Ámame sin prisa, quiéreme con locura, tócame con ansias, porque todo mi ser es tuyo, pequeña.
Se sigue repitiendo esa frase en mi cabeza, no la puedo sacar, es como si fuera un disco rayado, pero amo ese disco rayado.
No sé qué decir, pensar o hacer, solo quiero quedarme con él, en esta playa, abrazándolo.
Acaricio su espalda sintiendo el aire en mi cabello y escuchando el armonioso sonido que hacen las olas.
Es un lugar mágico y especial. No creo en la magia ni me fascina mucho que digamos, pero creo que "El más poderoso hechizo para ser amado es amar".
Creo fielmente que estoy hechizada por mi alemán "Axel Hoffman". Si pudiera amarlo por siempre lo haría, pero no existe un por siempre, así que lo amaré aquí y ahora.
Él deja de abrazarme por detrás y se sienta en la arena. Extiende su mano para que me siente encima de él y eso hago, me hace un espacio en el centro de sus piernas y allí me siento. Recuesto mi espalda de él para admirar la belleza del sol escondiéndose, además de que éste hace brillar las aguas del mar.
Me siento tan en paz en sus brazos, donde debo estar.
—Amo tus besos, tus caricias, tu cabello, tu cuello, en sí, amo todo de ti. Pero lo que más amo de tu cuerpo y de ti, son tus abrazos. Me hacen levitar, haces que sienta que vuelo, no hay nada más delicioso que sentir tus brazos abrazando mi cintura, acariciando mi espalda, tu respiración en mi cuello y los suaves besos que me das. Juro que no pido más que eso, pequeña...
—Y yo amo que me cuides, que me des besos en la mañana acabada de despertar, me gusta que me hagas mimos y lo que más me encanta es que me beses, es lo mejor del mundo. —le digo inspirada por ser tan lindo conmigo—. No te alejes de mí nunca, ¿sí?
—¿Por qué me alejaría de ti, pequeña? — dice esto con cara de preocupación.
—Eres lo mejor que me ha pasado en la vida y las cosas buenas se van de repente y en mi caso, nunca he sido feliz y tengo el sentimiento de que te irás en cualquier momento y eso me da pánico. —digo casi al punto de querer llorar.
—Siento lo mismo, siento que algo tan bueno no puede ser para mí, que no te merezco, pero juro que hago lo posible por merecerte y haré lo más que posible por merecerte toda la vida.
—Yo también...—Giro mi cuerpo y posiciono mis brazos en sus hombros con el fin de darle un beso en los cachetes y él emocionado se empieza a carcajear, se ríe tan natural que se ve como un dios mitológico nórdico. Al final yo también termino acompañándolo porque comencé a reírme y ni sé el por qué.
