CAPÍTULO 11

1K 108 14
                                    


Tenía ganas de aventar el celular contra el suelo y hacerlo mil pedazos, destruirlo para que Jeno ya no tuviera como comunicarse con ese hombre.

Por fin podía darle nombre al amante de su esposo y no sabía si eso era bueno o malo.

Y lo que era peor, no tenía derecho a reclamar, no tenía derecho a sentirse indignado, Renjun no era mejor que Jeno. Él también le había engañado, había sido infiel.

Su conciencia no lo permitía, no se sentía con ningún derecho.

Dejo el celular donde estaba y se acostó en la cama aguantándose las lágrimas ya no quería saber nada de Jeno ni del tal Haechan.

Haechan... Haechan... Lo odiaba, odiaba a Haechan por destruir lo que creía su hogar ya no había vuelta atrás, ya no había confianza y probablemente ya no había amor.

Jeno no lo amaba y Renjun no se creía capaz de seguir amando al castaño, no como antes no como la primera vez.

Jeno había insistido y él se había negado fingiendo estar cansado y enfermo. Jeno aun así lo abrazo toda la noche y Renjun no quería ilusionarse con algo que ya no existía.

La mañana llegó rápido y se fue rápido también. Llevo a su hija a la escuela, le prometió a Jeno que iría al doctor lo cual no hizo por obvias razones.

Después trabajo toda la mañana en la sección que tenía que entregar a fin de mes.

Hasta que su teléfono sonó fue un debate mental entre contestar o no... Contestar y pasar un buen rato o no y terminar aquello de una buena vez.

Pero quería aquello que sólo Jaemin podía darle en ese momento.

"hola daddy, he sido un niño malo lo siento, ¿Qué me harás Daddy?"

Sí, Renjun estaba desesperado por un poquito de amor.

INFIEL [NOREN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora