ᰔᩚ 011

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Jeon sostenía las caderas de Jimin mientras éste subía y bajaba frenéticamente de su entrepierna. El auto se movía de un lado al otro, los vidrios estaban empañados, los gemidos de ambos eran reemplazados por la boca del otro para no hacer ruido y que los descubrieran, aunque dónde estaban nadie podría descubrirlos.

Jungkook había llevado a Jimin la hermosa propiedad que él poseía, al frente había un hermoso lago, un terreno verde y lleno de árboles, la noche estaba perfecta para que dos amantes se dejarán llevar por la lujuria y pasión.

Jimin no paraba de gemir mientras brincaba sobre él la entrepierna de Jeon, se sostenía de sus hombros ya algo rasguñados por él aferré de Jimin.
Jeon disfrutaba de tocar su cuerpo, apretando sus nalgas mientras mordía sus tetillas. Tomó el pene del rubio subiendo y bajando su mano para más placer, el rubio no podía más, era tan jodidamente excitante sentir el doble placer.

—Ya no puedo más... —dice Jimin en un gemido dejando caer su cabeza en el cuello del pelinegro besándolo en el proceso.

—Un poco más, nene y te corres junto a mí. —Mordió su clavícula haciendo que el rubio gritara un poco. —Sólo... Un poco más.

Jimin saltaba frenéticamente, sus piernas dolían el poco espacio de su auto, no ayudaba mucho que digamos, su cuerpo estaba completamente sudado ya no podía más, estaba cansado y su cabeza dolía un poco por los golpes que se daba en el techo del auto. Jeon se dio cuenta de ello y de un rápido movimiento lo tomó de la cintura solo para acomodarlo en asiento.

Tomó su pierna para recostarse y después penetrar otra vez. Jimin gruño ante lo delicioso que fue esa estocada en ese punto que lo volvía loco, beso su boca ferozmente disfrutando el sonido obsceno de sus estocadas. Jungkook disfruto de cada parte del cuerpo del rubio, haciéndolo cómo se le dió la gana. Definitivamente, su jefe era el mejor hombre con el que ha estado, su cuerpo lo hipnotizaba, sus besos, los labios tan abultados, ese trasero enorme que se cargaba, esa diminuta cintura que cabía perfecto en sus manos, él lo tenía todo.

Unos minutos después ambos llegaron al éxtasis del placer, Jimin se corrió y Jeon llenó el condón dejando salir hasta el último de sus suspiros. Ambos tratando de recomponer la respiración, se miran el uno con el otro. Esto les parecía la suma gloria, un sexo increíble en un auto en medio de la nada, algo que Jimin jamás habría hecho por su ética y buen gusto, pero con Jeon sentía que podía hacerlo incluso en un callejón oscuro sin importarle si alguien los pueda escuchar.

Jimin por instinto toma el rostro de Jeon besando sus labios lentamente y con una delicadeza, como si hubiera más que solo el sexo, Jeon se extrañó, pero él le siguió. Se llenan de caricias y toques suaves, estaban demasiado en su burbuja que solo el móvil de Jimin los hizo separarse.

—Joder quería otra ronda —Siguió con su tarea de besar el cuerpo del rubio bajo su cuerpo —No contestes nene. -susurro.

Jimin disfrutaba de los besos sobre su cuello y pecho, realmente estaba agotado para otra ronda, pero su cuerpo no parecía hacerle caso, se estaba dejando llevar. Pero su móvil no dejaba de sonar, rompía su ambiente Hot con su modelo, así que decidió contestar a pesar que Jeon estaba haciéndole un buen oral pues se metió todo su pene a la boca, haciendo arquear su espalda.

—H-hola... —aguanto el gemido al sentir la esa legua hacerle maravillas.

—¡Jimin que bueno que contestas! Hay algo importante que tengo que decirte, es urgente.

𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗠𝗲 𝗛𝗮𝗿𝗱𝗲𝗿 🔥𝗸.𝗺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora