CAPÍTULO 17: ENTRENAMIENTO

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  Ya había pasado una semana, una semana en la que Izuku fue registrado como enfermo, una obvia mentira, ya que se encontraba entrenando en la casa de All Might. Allí, el amplio patio y las pesas de distintos tipos le ofrecían un espacio perfecto para trabajar en su fuerza.

—Si mis cálculos son correctos... con solo entrenar esto... en tres meses alcanzaré mi nivel: un 70% del One For All, 100% del Full Cowl, 50% de los látigos, 100% de la pantalla de humo, 80% de flotar y 30% de Fa Jin... —murmuraba mientras se concentraba en sus rutinas.

—Joven Midoriya... gracias... —dijo All Might, con una mezcla de admiración y gratitud en su voz.

—¿Por qué me agradeces? Las cosas están saliendo peor cada vez que cambio las cosas... —respondió Izuku, bajando la cabeza, sintiéndose abrumado por la presión que conllevaban sus decisiones.

—Gracias a ti... pude evitar reducir mi transformación... —explicó All Might, la seriedad en su mirada reflejando la gravedad de la situación.

—Pasaste de tres a una hora en mi línea temporal... —Izuku recordó, sintiendo el peso de la responsabilidad.

—Ahora puedo usar mi modo musculoso durante dos horas y media —respondió All Might

—Eso es una buena noticia... y también deberías prepararte... —dijo Izuku, con un tono serio mientras se concentraba en su entrenamiento.

—¿Qué sucede más adelante? —preguntó All Might, preocupado por lo que su aprendiz iba a revelarle.

—Tu retiro... Tendrás peleas contra All For One. Aunque logres vencerlo, perderás lo último de tu quirk y te retirarás de la profesión —respondió Izuku, sintiendo el peso de sus palabras.

—Ya veo... —dijo All Might, procesando la información. —(Entonces no voy a morir... Te equivocaste, sir...) —sonrió, sintiéndose aliviado al saber que aún tendría tiempo.

—Actualmente, soy capaz de levantar 40 kilogramos en cada brazo... y puedo aguantar 150 kilos sobre mis piernas —continuó Izuku, lleno de determinación. —He estado entrenando mis serratos y mis oblicuos para tener mayor resistencia a los golpes. Estoy mejorando en todos los aspectos... En términos físicos, estoy en un 80% de alcanzar mi mayor nivel.

—Wow... has cambiado, y en tan poco tiempo —exclamó All Might, admirando la dedicación de su aprendiz.

—Lo sé... Pero es necesario. Con este cuerpo, podría aguantar todo el One For All, pero debo dominarlo primero. Si no, podría sufrir fatigas musculares que deterioren mi potencial... y no quiero eso —respondió Izuku, mientras terminaba de hacer sus ejercicios.

—¿Estás descansando? —preguntó All Might, con un tono de preocupación.

—Sí, duermo ocho horas y dejo al menos dos días de descanso. También despejo mi mente con meditaciones, aunque aún no he logrado alejar todas las perturbaciones de mi mente...

—Ya veo... Deberías asistir mañana. Habrá una actividad con un compañero, y yo la voy a dar... Y esto... —dijo, un poco avergonzado—. Puedo meter mano para arreglar algunas parejas...

—All Might... deberías obligar a entrenar a todos... —sugirió Izuku, con un tono de preocupación.

—¿No quieres? —preguntó All Might, levantando una ceja.

—Sí, iré... —respondió, rascándose la mejilla con vergüenza—. Pero creo que hay muchos de mis compañeros con un potencial sorprendente.

—¿Cómo quién? —inquirió All Might, interesado.

—Miru Mineta, sin duda, un chico deplorable, pero eso a la U.A. nunca le importó, es débil, lento, y poco inteligente... Pero... Su quirk... Carajo... Si pudiera tenerlo sería completamente invencible...

—Ya veo a qué te refieres... —asintió All Might, comprendiendo el punto de su aprendiz.

—Ochako Uraraka, una chica fuerte, ágil y rápida, pero se queda corta al lado de las más fuertes, a mi gusto, que son Mina y Tsuyu —analizó Izuku mientras levantaba un par de pesas, concentrándose en su rutina—. Aún así, podría ganar un combate a ambas si hace uso de su quirk. En verdad, su quirk es útil en combate, a menos que su rival pueda controlarse en el aire con un quirk como el de Shoto o el de Bakugo. Debería aumentar sus capacidades de combate.

—Eres duro, aún con la chica que te gusta... —dijo All Might, esbozando una sonrisa mientras observaba a Izuku entrenar con determinación.

—Es... por su bien —respondió Izuku, tomando un sorbo de agua y secándose el sudor de la frente con una toalla—. Denki Kaminari es débil, estúpido, lento y muy poco servible en un combate en equipo, pero individualmente... es muy bueno. Su quirk le permite destacar en solitario, solo necesita mejorar la manera de usarlo y aprender a combatir...

All Might asintió, anotando en su libreta con seriedad mientras Izuku continuaba su entrenamiento, levantando más peso.

—¿Quién más? —preguntó All Might, con interés.

—Momo Yaoyorozu. Su quirk es muy bueno. Si supiera combatir con armas, sería una heroína formidable —dijo Izuku, mientras cambiaba las pesas en su barra—. Es débil en solitario, pero en combate en equipo destaca demasiado...

—Sigue... —instó All Might, observando cómo Izuku se esforzaba en cada repetición.

—Koda... me duele decirlo, pero no sirve. Lo lamento por él, pero si no mejora en combate, es muy poco probable que logre salvarlo; es un peso muerto para mí... —Izuku hizo una pausa, mirando al suelo con una expresión seria.

—¿Quién más? —preguntó All Might, haciendo un gesto para que continuara mientras se ajustaba el cinturón.

—Shinso... —dijo Izuku, volviendo a su rutina de levantamiento.

—¿Shinso? ¿El de cursos generales? —inquirió All Might, sorprendido, al ver la intensidad en los ojos de Izuku.

—Sí... En mi línea temporal, me costó mucho trabajo derrotarlo. Solo dile a Aizawa que debería darle una oportunidad y que lo entrene —dijo Izuku, con determinación mientras terminaba su serie de ejercicios, sintiendo cómo la fatiga comenzaba a acumularse en sus músculos.

—Estás pidiendo demasiado, joven... —respondió All Might, con una mezcla de preocupación y admiración por la pasión que mostraba Izuku.

—Es mucho más capaz que muchos de la clase... —aseguró Izuku, respirando con esfuerzo pero sin dejar de sonreír por la convicción en su voz.

—Midoriya Izuku... capacidades reprimidas por su falta de decisión... —murmuró Izuku para sí mismo mientras se preparaba para levantar una barra de 150 kilos, el sudor perlaba su frente y su respiración se hacía más pesada.

—Joven... —interrumpió All Might, acercándose a él con preocupación, notando la intensidad en su rostro.

—Falta de rapidez... —continuó Izuku, apretando los dientes con frustración mientras se concentraba en su objetivo—. Falta de velocidad de reacción... —gritó, sintiendo cómo la barra presionaba contra su pecho. Su cuerpo temblaba ligeramente bajo el peso, pero no iba a rendirse.

—Joven Midoriya... no se torture por no habernos salvado... —dijo All Might, colocando una mano en el hombro de Izuku, transmitiéndole su apoyo. Pero Izuku estaba decidido, apretando aún más los dientes, sintiendo cómo el peso lo desafiaba, pero no iba a dejar que eso lo detuviera.

Izuku levantó la barra con un esfuerzo monumental, sus músculos gritando por ayuda, pero su mente seguía repitiendo las palabras de aliento. La barra se levantaba lentamente, como si el tiempo se detuviera en ese momento.

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ACTUALIZADO EL 03/10/24

REESCRIBIENDO LA HISTORIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora