Una joven prometida se empeña en descubrir la verdad sobre el asesinato que ocurrió hace años. Sin embargo, el misterio se complicará. Todos tienen algo que decir y ocultar.
Si te pica la curiosidad por desvelar un secreto de hace años, no rasques...
Al día siguiente Diego fue a la comisaría por lo que la Señora Aguirre le comentó anoche. Allí no le dejaron ver su cuerpo pero le dieron las pertenencias que el señor llevaba cuando le detuvieron. Entre esas pertenencias había una llave que destacaba entre todas las demás, Diego la cogió y la miró bien, detenidamente, enseguida se dio cuenta que puerta podría abrir esa llave. También había otra noticia que le interesaba, esa mañana habían encontrado el cuerpo de una mujer en la orilla del río y pensaron que podría tratarse de su mujer. Dejaron que él la viese para corroborar su identidad pero esa mujer no era su esposa, era la hija del Señor Ciga. Harta de todo y sin nada que perder se fue a la parte más profunda del río a quitarse la vida. Deprisa Diego salió de la comisaría y se fue directamente al palacete.
Entró en la casa, y en la puerta miró adentro, hacia ese interior oscuro, sin luz. Se acercó a una ventana y puso sus manos en las contraventanas para abrirlas, pero no lo hizo, encendió la luz y se dirigió directamente hacia el sótano. Abrió la puerta con la llave y bajó las escaleras, lo hizo despacio sin hacer ruido, como si no quisiera despertar a los fantasmas que vivían en su interior. En el último escalón se paró y con la mano que estaba apoyaba en la barandilla de las escaleras encendió la bombilla que colgaba del techo. Avanzó unos pasos hacia delante y en el sitio giró hasta quedarse enfrente de la puerta de metal, volvió a dar unos pasos en esa dirección hasta situarse a unos pocos centímetros de la puerta metálica. Con una mano tocó la puerta y la sintió fría, se quedó unos segundos quieto en silencio, sólo se oía su respiración. Apartó la mano de la puerta y de su bolsillo derecho sacó una llave de hierro, la metió en la cerradura y lentamente la giró. Abrió la puerta.
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