CAPÍTULO 20: LLORANDO LOS DIAS I

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Eran las 2:30 am de la mañana, y acababa de llegar a casa, Cler y Marta ya estaban en la cama, fui a la cocina y me hice una infusión para dormir, me puse el pijama y me metí en la cama pensando en todo lo ocurrido durante la noche. Sinceramente, no sé cómo hubiera aguantado sin la ayuda de Blake y Ethan. Tampoco lograba entender lo que había hecho Bruno, ni dónde estaba metido junto a Hugo. También pensé en Alex, ella sufría en silencio. Y mi tía, que estaba preocupada por mí. Pero mis últimos pensamientos fueron para mis padres, en especial a mi madre, ahora era cuando más la necesitaba, y ya no estaba.

-Mamá… Te extraño – digo a la vez que bostezo y caigo en un profundo sueño.

(…)

-Dana, cariño ves levantándote que son las 5:45pm de la tarde, si sigues durmiendo te dolerá aún más la cabeza – me dice mi tía cariñosamente.

-Mmm, losé, pero si duermo olvido… - digo sin darme cuenta.

-Y tampoco recuerdas – me dice, no lo comprendo, y abro los ojos para saber de que se trata – Sean me explicó anoche el porqué de tu carácter.

-¿Te lo explicó… Todo, todo? – pregunto preocupada y ella asiente.

Me siento en mi cama para estar más cómoda mientras hablamos.

-Muy guapo ese tal Blake eh…

-Tía, por favor, acabo de romper con Bruno ¿sabes el porqué? – me cruzo de brazos y ella niega.

-Haber… - suspiro – vi a Bruno besando a una amiga que vino con nosotros, y después Ethan me dijo que… Bruno y Hugo son camellos y le ofrecieron, y trabajo también – dije flojito y rápido.

Ella se quedó de piedra.

-Dios mi niña – me abrazó fuerte.

-Tita Beth – dije.

-Mhm

-Gracias por estar ahí, por acogerme, por ser mi segunda madre… - el abrazo se intensificó y otra de las lágrimas traicioneras que habitaban en mis lagrimales cayó por mi mejilla.

Mi teléfono comenzó a sonar, me separe lentamente de mi tía.

-¿Quieres que se lo explique yo a Cler y a Marta? –asiento – vale – dice flojo y con voz suave.

Miro el teléfono y mi entrecejo se arruga.

*Conversación*

-¿Qué quieres? – digo seca y sin ganas de hablar, si es que no sé para que se lo cojo. Suspiro agotada.

-Arreglar lo nuestro – dice, parece arrepentido de lo que hizo.

-Cameron, ¿podríamos quedar?

-Claro, ¿quieres que pase a recogerte?

-No, mejor quedamos en el parque de las fuentes.

-Vale, nos vemos allí en 30 minutos. Adiós – dice ahora más feliz.

-Hasta luego.

*Fin de la conversación*

-Me meto en la ducha para despejarme, en menos de 10 minutos salgo y me dirijo hacia el armario, no quiero ponerme muy guapa, lo normal para salir. Me decido por una falda morada con flores no demasiado llamativa, lo convino con una blusa blanca muy holgada remetida por la falda y cayendo por mi hombro derecho. Me pongo unos botines beige, me hago una cola alta, me maquillo, y me voy.

-Adiós, me voy a ver si me despejo – grito desde la puerta dispuesta a salir, cuando alguien me interrumpe.

-¡Espera! – Me llama Cler bajando rápido por las escaleras – Dios – dice abrazándome fuerte, cuando llegue Marta se lo explicaré – asiento y abro la puerta.

-He quedado con alguien, me tengo que ir – le doy un beso a la mejilla y con la mano nos despedimos.

-A sí – digo abriendo la puerta de nuevo, dile a Ethan que le cojo la MTT Turbine Streetfightergrito a la nada y cojo las llaves justo antes de marcharme.

Entro al garaje y me pongo el casco negro con líneas raras que parecen extremidades de neuronas de color aguamarina. La moto es igual. Miro mi teléfono y sólo me quedan 3 minutos. Salgo del garaje y con el mando lo cierro, acelero y en 2 minutos llego, le pongo al candado y veo a Cameron sentado en un banco con una rosa en la mano.

Suspiro y me acerco a él a paso rápido.

-Nena, vuelve conmigo – se arrodilla con nuestra rosa, la de color blanco que me regaló cuando le dije que sí.

-Cam, no he venido para eso – digo suspirando – He venido porque sé que tienes contactos, y necesito ayudarlo.

-¿Ayudar a quién?

-A mi ex. Cameron, mira, he roto con Bruno, me quiero arreglar contigo, si es cierto, pero no quiero volver. Además he perdido total confianza con cualquier chico excepto en mi primo – Bajo la cabeza.

-No entiendo, ¿Por qué habéis roto, y para qué me necesitas? – pregunta extrañado.

-Lo he dejado porque me ha engañado con una amiga, y además… Está metido en el mundo de la droga –Las ganas de llorar no tardan en llegar, pero prometí no volver a llorar por un chico, no al menos delante de él o cualquier otro.

-Vale, y necesitas a Max ¿no? – pregunta adivinando mi petición.

-Si – digo con la voz entrecortada.

-Bien, pero necesitaremos más información, necesito saber quién es su jefe, sus compañeros, y cómo se comunica con nuevos o habituales clientes. Y… Si hace otro tipo de trabajos.

-Vale, lo llamaré y quedaré con él aquí en 20 minutos.

Y así lo hice.

Como pueden ver, este capítulo tiene 2ª parte.

Esperen el otro capítulo pronto.

Nos leemos pronto, voten y comenten las amo <3

Tú y tu mundo #Wattys2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora