DOS MESES DESPUÉS...
Os preguntaréis que han pasado durante estos dos meses... pues nada en especial, estamos a una semana de entrar en invierno, ya hace frío, y yo me he distanciado de todo el mundo, mis amigos, mi familia... Aunque eso me ha ayudado bastante con los estudios, sigo disgustada por mi comportamiento aquel día en el cementerio, me pasaba el día estudiando entre lágrimas y silenciosos sollozos, mirando el móvil con escusa de mirar la hora, pero lo que de verdad me importaba era recibir una llamada, un mensaje, cualquier cosa proveniente de ese alguien, que me diera soporte en estos momentos. Pero eso nunca llegaría, estaba sola.
Alex y Luke ahora son mejores amigos, se llevan de maravilla y creo que irá a más, pero no les meto presión.
Hace un mes que Cler y Ryan salen juntos, me alegro bastante por ellos, Marta sigue soltera, y Emi y Ethan juntitos y felices.
No como casi, no bebo, no salgo, solo lloro y estudio en silencio, somos yo, mi música y mis libros. Me entero de lo que pasa en el exterior gracias a Facebook, a Twitter y ask.fm.
TRES SEMANAS DESPUÉS...
Estamos en las vacaciones de Navidad, nos vamos a celebrarlas a España con mis abuelos, ella es de allí, criaron a mi madre en España, pero mi padre es de Alemania, aunque se conocieron en Holanda, se enamoraron de Eindhoven y de ellos mismos, y se quedaron a vivir allí.
Estamos en el avión, yo estoy escuchando música con Sean al lado, mientras Ethan está con Emi y la tía, y Cler con Ryan y Marta. No me aburro, sólo me quedo relajada mientras me duermo lentamente.
-Señores pasajeros, les rogamos que se desabrochen los cinturones y bajen el avión tranquilamente, el vuelo Ámsterdam-Barcelona ha finalizado – dijo una azafata latina.
Bajamos y con el coche de mi primo (un Lexus LFA blanco). Y el de mi prima (un jaguar XK Coupe 4.2 negro) vamos hasta Terrassa, la ciudad donde mis ricos abuelos viven, tienen una central eólica que proporciona la energía necesaria toda Cataluña, Aragón y Andalucía. Así que dinero no les falta.
Llegamos y nos recibieron con los brazos abiertos y muy contentos.
-¡Hola cariños míos! – grita mi abuela chillando (para variar) - ¿Qué tal todo y el viaje?
-Muy bien yaya – le doy un beso - ¿y el yayo?
-En el comedor nieta mía- reímos y entro.
-Pero que cojones... - hago una pausa y me pellizco – Chicas ¿Qué hacéis aquí? – me sorprendo/asusto.
-Necesitas despejarte, y necesitas a tus amigas – me regaña Arii – Y ya que nos hemos molestado en venir, nos debes una explicación, y una tarde de chicas cómo mínimo.
-Buf... - suspiro – chicas, gracias de verdad pero, creo que estaría mejor so.
-¿Pero te has vuelto loca? – me regaña mi abuelo – necesitas despejarte, salir a la calle a disfrutar, estas en la flor de la vida y ninguno de nosotros aceptará un no por respuesta, así que ya puedes dejar las maletas en tu cuarto e irte a por ropa con tus amigas ya – abrazo a mi abuelo y le susurro:
-Te he echado de menos...
Me separo de él y me dirijo a mi cuarto.
-Pero que...
Lo veo todo nuevo, la habitación sigue siendo enrome y acogedora, solo que ahora la pared de la cama es negra, con una foto de mi familia encima, todo lo demás es blanco, los muebles nuevos pero rústicos y rurales, eran blancos, negros y marrones, suena muy apagado, pero la habitación tenía una iluminación increíble gracias al ventanal que daba a un increíble balcón. La cama era de canapé de madera moderna y un canapé azul clarito, la colcha era de muchos colores de tonos desde azul hasta gris y blancos con el fondo negro, era realmente increíble y bonita, las cortinas eran blancas casi transparentes. Sobre la cama había una niña pequeña sentada, con el pelo negro recogido en una coleta. Se giró al notar mi presencia y la pequeña Amy se lanzó sobre mí.
-¡Princesa Dana!!!!!!!! – gritó.
-Hola pequeña – le sonreí - ¿Qué haces aquí? – le pregunté cuando nos separemos.
-Me ha traído el príncipe Black – ríe. Mi cara pasó de felicidad y sorprendida a preocupada y nerviosa.
-¿Él...? – Mierda Dana deja de tartamudear que estas con una niña de cinco años - ¿él está aquí? – pregunto nerviosa.
-Si, tenemos que hablar, y ya no podía esperar más – dice saliendo de mi baño.
-¿Qué coño hacias en mi baño? – pregunto con un tono tranquilo.
-Supongo que quería darte una sorpresa.
Sonrío y me lanzo sobre él, lo abrazo y caemos sobre la cama, rodamos y él queda sobre mi, el ambiente se tensa, le doy un beso en la mejilla y lo aparto.
-Te he echado de menos – le susurro al oído antes de levantarme.
-Losé – dice con aires de superioridad.
-Aghhhh, te odio – le digo odiando su superioridad.
-Yo más – me saca la lengua.
-En verdad me amas, y quieres hacerme hijos – río y lo empujo.
-¿Perdona? – me pregunta contrariado, me río.
-Amy cariño, abajo hay una chica que se llama Marta, dile que quieres jugar con ella en el jardín anda – ella asiente y nos dice adiós con la manita.
-¿Así que te quiero hacer hijos no...? – asiento – Porque... - dice para que yo continúe la frase, me río y le señalo entre las piernas, se mira y corriendo se gira – vale, vale ya he entendido.
-Vale – río – te dejo un momento a solas, estaré con las chicas dando una vuelta.
Nos vamos al centro a comprar, cuando llegamos a casa, con muchas risas y bromas de por medio, nos encontramos con la mesa puesta, parece mentira que quepa tanta gente, aunque faltaban dos cubiertos. Me duché y Cler entró a mi cuarto.
-Ponte guapa – me dice y se va.
Decidí hacerle caso y me puse unos pantalones tejanos ajustados con dobladillo al final de las piernas, con una camiseta de manga corta con la parte superior naranja rosado con un bolsillo del mismo color, y la mayoría de la camiseta tenía por delante una parte blanca con rayas azul oscuro, me puse unos tacones beige que realzaban mis piernas, me hice una coleta alta recogiendo mi melena rubia, y me maquillé.
-Qué guapa nena.
-¿Cómo que nena? – pregunté sorprendida.
-Bah, un apodo – se encoge de hombros.
-Vale, príncipe Black – me reí de él.
-Eh, no me llames así o sino...
-¿O sino qué? – me arrepentí al instante. Mierda.
-Uy nena, no deberías haber dicho eso – ríe, yo salgo corriendo, putos tacones. Me coge de la cintura, me levanta del suelo, y me lleva de vuelta a la cama, me tira encima y se pone a horcajadas sobre mí, nos quedamos en silencio durante un rato que resultan ser segundos, sus ojos me hipnotizan y cuando ya he caído, comienza a hacerme cosquillas.
-N...No...- grito – MIERDA P PARA YA – debo parar de hablar porque me veo interrumpida por mis propias carcajadas – VALE, VALE YA LO HE ENTENDIDO, JODER YA está.
-¿Y qué me darás a cambio? – Puto.
-Lo que quieras pero por favor para ya hijo de fruta – me estaba a punto de mear de risa.
-Vale, pero por decir hijo de fruta será algo más.
Conseguí librarme de su agarre y liberé mis brazos de mi espalda, puse mis manos en.
&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&&
Cap nuevooo.
Comenten y denle a la estrellita.
Las amo <3
ESTÁS LEYENDO
Tú y tu mundo #Wattys2017
RomanceDana es una chica normal y corriente, pero bastante tímida. Por desgracia, no todo le ha ido bien, su pasado ha sido una auténtica pesadilla, su ex la acosa, pero sus amigos siempre van a estar ahí, tanto los viejos como los nuevos. Tras un...