Me encontraba en la vacía estación de tren esperando a que mamá o Ted se acordasen de que venía. Aunque sinceramente, no creía que Ted se acordase de eso, seguro estaba muy ocupado emborrachándose en algún bar o incluso en el sofá de casa y eso que aún eran las 10 de la mañana de un sábado.
Al escuchar el ruído de un coche levanté la cabeza para encontrarme el coche de Nate con él de piloto y Maddy de copiloto.
- ¡Ivy! - exclamó mi hermana en cuanto me vio para no tardar en correr hacia mi dirección para abrazarnos.
- Oh Mad, te extrañé muchísimo y tengo un montón de cosas que contarte, - empecé a decirle mientras nos separábamos del abrazo - no quería hablar nada sin poder verte a la cara.
Maddy me sonrió para después dejar paso a Nate, quien también me abrazó.
- Menos mal que has vuelto, enana. Aunque seas insufrible, se te echó en falta.
- Nate, no seas tonto. ¿Insufrible yo? Sabes que me amas y, obviamente, ninguno de vosotros podría vivir sin mi. -
Al acabar de decirlo, me moví el pelo como toda una diva para dirigirme a los asientos traseros del coche.
- ¡Nate, las maletas! - le grité cerrando la puerta mientras escuchaba sus risas, me aman.
...
Al llegar a casa y bajar mis maletas, Maddy y Nate se despidieron ya que habían quedado con unos amigos y yo no tenía ganas de ir con ellos.
Subí a mi habitación para cambiarme, si mamá me veía en vaqueros, rápidamente me diría que fuese más femenina como Mad. Lo bueno era que según el día, podía ser toda una señorita femenina reina de la feminidad o tu hermano del Bronx con ropa mil tallas mayor.
Después de cambiarme a doña femenina, decidí visitar a mi amiga Rue. Ella es 2 años mayor que yo, pero aún así, nos llevamos bien y cuando está sobria, aún más.
Rue comenzó a consumir desde temprana edad mientras acompañaba a su padre enfermo en cama como vía para afrontar la vida.
Después de unos minutos caminando, llegué a su casa. Llamé a la puerta y salió Gia.
- Hola Gigi ¿está Rue? - le pregunté con emoción de volver a vernos, no era mi única amiga, pero si la más cercana en cuanto a relación. Siempre podría contar con ella.
- ¿Ivy? ¿No estabas con tu padre? Ay madre, que has vuelto. ¿Cuándo? Y sobre todo, ¿por qué no nos avisaste? - habló rápidamente Gia. Pensaba que se iba a quedar sin aire.
- Wow wow Gia, respira. - le dije entre risas - Llegué hoy hace un par de horas y no os quería molestar. -
- Sabes que nunca eres una molestia, eres como de la familia. Y respecto a Rue... ella está en una clínica de desintoxicación, el lunes tenemos que ir a buscarla. Pero oye, estaba a punto de empezar una película, si quieres acompañarme... - sugirió Gigi.
- Claro que sí. -
Me dejó pasar y nos sentamos en el sofá a ver la película.
...
Cuando acabó nos despedimos y me puse rumbo a casa, otra vez.
De vuelta a casa decidí ir por un camino que nunca usé, siempre iba por el otro lado, costumbres. Vi una pequeña tienda, la verdad es que tenía sed, asique decidí entrar a comprar algo de beber.
Al entrar me encontré a un chico pelirrojo y a otro que parecía de mi edad dentro, apoyados en el mostrador.
- Hola - dije por educación al entrar.
- Hola ¿puedo ayudarte en algo? - respondió el pelirrojo.
- Oh bueno, un agua, por favor. -
El chico moreno seguía sin decir nada, solo me observaba.
- ¿Eres nueva por aquí? ¿De viaje? - siguió preguntando.
- No no, vivo aquí, solo que es la primera vez que vengo por esta zona. Además, acabo de volver de un viaje. - respondí esta vez yo.
- En ese caso, la casa invita, así nos aseguramos de que vuelvas - dijo mientras se reía.
- Buena estrategia de marketing, aunque fallaría si decido no volver - bromeé un poco.
Se veía amistoso, nada que ver con el otro.
- En ese caso no vuelvas - habló por primera vez en tono borde.
- Ashtray, no seas así, joder. Por cierto, soy Fezco; mis amigos me dicen Fez. -
- Yo soy Ivy, encantada. -
- ¿Ivy? ¿Qué haces aquí? - sentí una voz que reconocería de cualquier modo a mi espalda, Lexi.
Lexi es la mejor amiga de infancia de Rue y, también es amiga de mi hermana, al igual que su hermana mayor Cassie.
- Hola Lex. - le dije alegre - ¿Por qué todo el mundo reacciona así? Solo me fui, no he muerto. - le dije en tono bromista haciéndome la ofendida.
- No seas payasa, solo que Maddy no dijo nada. -
- Bueno, ya sabes como es. Si no es el centro de atención, lo ignora. - le comenté graciosa
- No hace falta que lo jures. ¿Y qué tal te fue? - interrogó de forma curiosa.
- Bien, bien. - respondí - Bueno Lexi, me tengo que ir a casa. Hasta luego Fez. - me despedí
- Chao Ivy - respondieron ambos.
Ashtray no dijo nada, y yo tampoco pensaba despedirme. Salí de la tienda y me fui a casa, donde no había nadie, asique me pasé lo que quedaba de día leyendo.
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SERENDIPIA (Ashtray I)
FanfictionDespués de un año me encontraba volviendo a casa. Echaba de menos a mamá y a Maddy, y bueno, a Ted también. Ted es el padre de mi hermana mayor Madeleine y el esposo de nuestra madre, Sonia. Cuando ellos se dieron un tiempo, mamá fue a una fiesta c...