Capítulo 3. "El amor está en el aire"

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Esteban

Al otro día decido ir a casa de Dante para hablar con él y quizás tener más información con respecto a la vida de mi hermana. La verdad es que Julieta no es una persona que cuente sus cosas con todo el mundo, ella siempre ha sido muy reservada con su vida. Casi siempre estaba afuera con sus amigos o trabajando, no era mucho de estar en casa, pero cuando lo estaba pasaba el mayor tiempo conmigo y hablábamos de nuestros asuntos, nos aconsejábamos.

Llamo a la puerta de la casa de Dante, es una casa muy grande y linda. De pronto sale un chico de unos 24 o 25 años con una cara sonriente.

– Hola, Dante. Mi nombre es Esteban, yo soy hermano de Julieta. – Me siento muy nervioso y no sé porque, debe ser por las ansias de saber algo más de Julieta.

– Hola, Esteban. Entra para que podamos hablar tranquilos.

Es una casa muy linda y acogedora.

– ¿Quieres algo de tomar?

– No, muchas gracias, estoy bien.

– Bueno, ¿Qué necesitas saber?

– Bien, como ya debes saber Julieta está secuestrada, y estoy buscándola desesperadamente, necesito que me digas todo lo que sabes sobre sus amigos, alguien que haya discutido con ella, o que lugares iba, todo lo que sepas y me ayude a saber en dónde puede estar. Por favor.

– Ok, bueno sí, con tu hermana somos novios desde hace unos meses, en unos días se cumplen un año que comenzamos a salir, ella me pidió que no le dijera a nadie sobre nuestra relación, aunque no sé porque, pero respeté su decisión y así lo hice. Y bueno ella trabajaba en la cafetería "Sol y Lluvia" sólo los viernes y fines de semana, porque en la semana debía ir a la universidad. Ella siempre le gustaba ir al centro comercial y comprar cosas, le encantaba eso.

– Gracias por decirme esto, pero necesito saber si Julieta se llevaba mal con alguna chica o chico, porque puede ser el secuestrador.

– Sí, tienes razón, bueno no se llevaba mal con nadie, ella no era de pelear con alguien, la verdad es que ella siempre se llevó muy bien con todos.

– ¿Estás seguro?

– Sí... Oye, que tal si mejor te ayudo a buscar información para reunirla y así tal vez descubramos al idiota que hizo esto.

– Sería de gran ayuda, Dante. Igualmente, Raquel, Sofía y Daniela me están ayudando a reunir información y también estamos buscando en sus lugares favoritos y por toda la ciudad.

– Bien, cualquier cosa que sepa te lo diré... Espero que pronto la encontremos sana y salva.

– Lo mismo espero. Bueno me tengo que ir, fue un gusto conocerte y gracias por darte el tiempo de hablar conmigo y decirme cosas de ella.

– No es nada, estoy dispuesto a ayudar con cualquier cosa con tal de encontrar a mi Osita de Melocotón. – ¿Qué demonios? ¿Acaba de llamar a Julieta "Osita de Melocotón"? ¿Qué clase de sobrenombre es ese?

– Ok, Chau Dante.

– Chau.

Y al salir a la calle cierro la puerta detrás de mí, camino unas cuántas calles y recibo una llamada de Daniela.

– Hola, Daniela ¿Cómo estás?

– Hey, Esteban ¿Bien y tú?

– Bien, ¿A qué debo el honor a esta sorpresiva llamada?

– Quería invitarte a salir a comer algo a un lugar muy lindo que está cerca de mi casa. ¿Quieres?

– Sí, me gustaría ¿A qué hora nos vemos?

– ¿Te parece a las 7 pm?

– Me parece genial, nos vemos, Chau.

– Chau.

Al terminar la llamada me di cuenta que estaba sonriendo como un idiota. Daniela es muy hermosa, tiene una onda muy especial, me gusta mucho.

Mi Búsqueda DesesperadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora