Cap 19.

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Pasaron cuatro meses desde que inicié oficialmente mi relación con Levi Ackerman.
Estamos el 16 de noviembre, cerca de los exámenes finales para luego tener dos meses de vacaciones.

Tenía un pequeño gran problema: el cumpleaños de Levi es en navidad, y yo debo pasar navidad en la casa de mis padres.

Por otra parte, Isabel me odia y me lo demuestra todos los días en la cafetería.

Hitch me ayuda a pasar el rato, para no sentirme tan mal. Ya que nunca fue mi intención arrebartarle a su mejor amigo.

Levi me ofreció trabajar en la empresa de su familia, me negué a hacerlo.

— ¿Y, qué haremos? — le pregunté.

— ¿Hacer de qué?

— Ya sabes, tu cumpleaños y navidad.

— Pasaremos juntos año nuevo. — dijo totalmente relajado.

— ¡Ese día ya no es tu cumpleaños, tonto! — exclamé molesta.

— Entonces pasa navidad aquí y año nuevo con tu madre.

Él siempre dando soluciones.

— Tienes razón.

🍡🍡🍡

Lentamente pasaron los días, la semana maldita de exámenes finalmente llegó.

— ¡Estoy tan nerviosa, que estoy comiéndome todas las malditas uñas! — exclamó Sasha totalmente abrumada.

— Tu comes lo que sea. — molestó el rubio.

— Calma, calma. — dije, masajeando el cuello de la castaña.

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Terminaron las rondas de los examenes finales.
Todos aprobamos.
Todos estábamos felices y contentos.
Finalmente pasamos al tercer año de la carrera.

— ¡Felicidades, mocosa! — me dio un beso corto.

— Levi... — pronuncié un tanto tímida.

— ¿Qué?

— ¿Y si, esta noche vemos peliculas o algo? Digo, quiero relajarme, en estos días estuve bastante tensa.

— ¿No prefieres salir a cenar?

— No. — respondí al instante. — no quiero nada de eso.

— Está bien, está bien — dijo alzando las manos.

🍡🍡🍡

Llegó la apreciada noche de peliculas.

Llegué a la casa de Levi, toqué el timbre y ¡sorpresa!

Levi con un gorro y un delantal de color azul.

— ¿Y eso? — alcé una ceja.

— Estoy cocinando para ti.

Guao.

— ¿Y qué estás cocinando para mi? — cuestioné, siguiendolo hasta la cocina.

— Pizzas con masa casera.

— ¿Sabes cocinar? — molesté.

— No, pero busqué un tutorial en youtube.

Ante esa respuesta solo pude sonreír.

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Después de un largo rato, subimos a la habitación, un Levi ya aseado preparó la mesa y las peliculas que veremos el día de hoy.

— ¿Con qué comenzaremos? — pregunté.

— Con "el títere".

— Suena interesante.

Comenzamos a ver la pelicula.
El sonido en sí ya me daba miedo, en serio, esta noche sí, me voy a mear en la cama pero no pienso ir sola al baño, es más, no pienso ni siquiera bajar los pies de la cama.

Después de terminar de ver el títere, que me dejó con los pelos de puntas, Levi puso "la noche del demonio".

En un momento Levi pausó la pelicula.
Lo observé.

— Ya vengo.

— ¿Qué? — agarré su muñeca — ¿a dónde vas?

— Iré a traer el jugo de la heladera.

— Iré contigo.

— Como quieras.

Como tonta fui detrás de él, ayudé a traer los vasos.
Volvimos a la habitación.

Él comenzó a avanzar hacia el baño.
Lo seguí.

— ¿Quiéres entrar? — preguntó.

— Eh... ¿vas a entrar? — pregunté.

El me dio una mirada de confusión.

— Sí.

— ¿Puedo entrar contigo? — pregunté nerviosa.

— ¿Qué? — frunció el ceño — ¿pasa algo?

— No, nada.

— Mikasa. — miró fríamente y luego comenzó a reír — ¿tienes miedo?

Quise negarlo, pero mi cuerpo reaccionó, asi que asentí brevemente.

— Va a ser incómodo.

— Por favor. — supliqué.

Él puso los ojos en blanco. — Bien.

Ambos ingresamos al baño.

— ¿Puedes girarte?

— Si. — respondí más tranquila.

Comencé a escuchar el sonido de la orina con el agua del inodoro.
Cuando dejé de escuchar, me volteé.

Levi aún no había guardado a su amigo.

Trágame tierra.

— ¡Mikasa! — exclamó totalmente sonrojado.

— Se ve bien. — dije mirando ahí abajo.

El rápidamente alzó su bóxer y su short.
Se lavó las manos y salió del baño.
Yo obviamente salí corriendo detrás de él.

— ¿Estás enojado? — pregunté acercándome a él, el cual estaba de espaldas.

Él meneó la cabeza.

— ¿Si estando blando se ve un buen trozo, significa que cuando esté duro será mucho más grande?

Vi a Levi cerrar sus manos en forma de puño.

Se volteó.

— ¿Por qué no lo averiguas por tu cuenta?

La fuerza del Destino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora