Marca «TaeKook»

18

Jin se había ido hace unos minutos, así que me encontraba solo, pues Tae no regresaba aún.

Quería ir al baño pero necesitaba ayuda, pues no podía hacer fuerza, pero ¿Que tan malo era hacerlo solo?
No haré mucha fuerza.

Suspire y preparándome mentalmente me destape y me senté en la cama dejando mis pies colgando. Me había dolido un poquito, pero fue soportable.
Estaba por levantarme cuando la puerta fue abierta y de ella Taehyung ingreso, fue hacia mi y me sentó en la cama. Su fuerte aroma me hizo tambalear, no era muy fuerte pero si olía más de lo normal.

—Jungkook, debiste llamar a una enfermera a que te ayudara, no puedes hacer esfuerzos. ¿A donde quieres ir?

—Baño —murmure, Taehyung me ayudo a levantarme y me sostuvo de la cintura para llevarme al baño.— No demorare mucho.

—Entrare contigo.

—Pero... —me sonroje, uh, me daba vergüenza, se que nosotros ya nos habíamos visto desnudos, pero no fue conscientemente.—

—Me volteare si quieres. —asenti suave y me llevo hasta enfrente del inodoro. Hize mis necesidades y me llevo de nuevo a la cama.— Listo, tengo que irme, vendré...

Tome su mano con fuerza, pues hablo rápido y apenas pude reaccionar.

—H-hoy es la cita con la doctora, Tae.  —murmure con un pequeño puchero, no quería que Taehyung se fuera, menos cuando la cita sería en media hora y lo quería junto a mi.

—Lo siento, Kook, pero —presione mis labios y solte su mano, el me tomó por los cachetes, eso me hizo sonrojar debido a que se acercó mucho a mi rostro— En unas horas entrare en celo, debo ir a un hotel.

—N-no —¿A un hotel? ¿Eso quiere decir que llamara a alguien para que lo atienda?

Eso pensamiento me hizo sentir mal y las ganas de llorar me apoderaron.

—T-tu...no...¿Pu-puedo ayudarte? —lo mire a la ojos, los míos estaban aguados y sabía que en cualquier momento la lágrimas caerían—

—Kook, no puedes, ahorita estas delicado —su tono suave me hizo romper en llanto y lo abraze fuerte de su cuello— Jungkook debo irme.

—N-no llames...a nadie, por favor —Dije entre sollozos, abrazándolo cada vez más fuerte— Por favor, si pudiera podría ayudarte, pero.. pero tienes razón, estoy delicado y no puedo.

—Amor —me separo suavemente de él, volviendo a la posición anterior tomando mis cachetes— No llamaré a nadie, nadie puede ser como tu, lindo y capaz de controlar a mi lobo, nadie puede a excepción de ti, además te respeto, respetaré nuestra relación y pasaré mi celo solo.

—No me gusta...

—Yo lo se, pero ahora no puedes ayudarme, para tu próximo celo estaremos juntos ¿si? —dejo un pequeño beso en mis labios— Debo irme ahora antes de que me desespere al seguir viéndote.

—Lo siento...

—No debes disculparte, no puedes y yo tampoco quiero hacerle daño a nuestro cachorro.

—No por eso, me refiero...a la forma en que te trate estos días —baje la mirada, tomé su mano y la dejé sobre mi vientre por encima de la bata— Solo...no pensé que esto llegaría a pasar y...tampoco pensé que perdería a mi madre, no estaba preparado.

—Oye, no es necesario disculparte, entiendo que fue un golpe duro para ti, también me pongo en tu lugar, es doloroso perder a un familiar. Tranquilo. Puedo seguir soportandote además. —solte un ligera risa por lo último y deje un beso en sus labios— Me iré ¿Okey? Vendré en tres días, te amo.

Asentí suave y antes de que se apartara lo bese de nuevo, pero un beso que duró unos minutos más, mezclando salivas. ¿Suena asqueroso? Sip, pero la sensación se siente...rica.

—También te amo —dejo un beso sobre mi vientre y tomo sus cosas para luego irse.

Bueno...ahora estaría solo...

[ ▪︎ ▪︎ ▪︎ ]

La doctora llegó a las cinco y media y estuvo apuntando mis datos, me ayudo a levantarme para pesarme y luego reviso mi vientre.

Confieso que al principio tuve miedo, me sentía...desprotegido sin tener a Tae a mi lado, pero pude relajarme cuando pude ver a mi pasita.

—Siete semanas, ¿cierto? —asenti— No se ve mal, es esa manchita blanca en la izquierda ¿lo reconoces?

—Si —sonreí inconscientemente, a pesar de ser una manchita— Doctora, he sentido unos dolores...un poquito fuertes, cada vez que hago mucho mucho esfuerzo.

—Es debido a tu sensibilidad, por lo que tengo entendido recibiste un ataque y tu vientre se golpeó ¿cierto?

—Si —baje la cabeza, me sentía culpable— me golpearon el vientre

—Por ahora no puedo decirte si presentará alguna anomalía o defecto físico hasta que cumpla los cinco o seis meses. Toma tus precauciones y ten reposo absoluto. Evitarás riesgos.

Asentí.

La doctora me reviso unos minutos más y luego me dijo que me limpiara el gel.

—Hasta ahora no veo nada malo, a excepción de tu peso, el bebé está bien debido a que consume las vitaminas de tu cuerpo, y a ti no te deja las suficientes, trata de comer saludable, las veces necesarias, tampoco excedas, te recetare unas vitaminas y complementos, se las daré al doctor con indicaciones para que te las den.

Cerca de las siete, me encontraba solo en la camilla, habia terminado de comer.

Me había levantado la bata, dejando expuesto mi vientre y mis piernas, aunque estas últimas las tape con las sábanas.

Volviendo a mi vientre, este había crecido un poquito más, no era mucha la diferencia pero yo si la veía.

—¿Te hize mucho daño estos días, cariño? —murmure acariciando mi vientre con una mano— Lo siento, bebe, trataré de tener buenas emociones para que no te afecten. La abuela murió...tu abuelita murió. —negue con lágrimas en los ojos. Dolia tanto pensar en mi mamá, dolia...mucho, mucho — Lo siento, nisiquiera tenía dinero ni condiciones para velarla, solo me entregaron sus cenizas, lo siento mamá..no pude darte todo lo que tu me diste —solloze, era difícil no sentirme miserable, era imposible dejar de llorar—

《 —¿Estas bien, amor? 》

《 No, pero tranquilo, ya se me pasará. Hablaremos cuando regreses ¿si? Queria decirte algo pero no me dio tiempo, te amo y...piensa en mi.》

《—Es justo lo que hago, omega. Te amo igual. Descansa, háblame por aquí  cuando quieras.》