¡Ay! Que mi cuerpo es pesado y de vez en cuando grita, que soy como un tornado, que devuelve pero también quita. Que a veces me voy de lado y tropiezo con mil manías, que me destruyen y me arman, que me dan valor o me lo quitan. Y es que soy cable enredado, refrán mal dicho, vaso sin fondo; armo un alboroto cuando mi entereza se ve comprometida y armo la arremetida entre palabras y versos cortos que valen más por lo que dicen que por su calidad de sonoros. Mira que me quiebro y estoy que lloro, mira que tiemblo y que cada vez abro más los ojos, que camino suponiendo que floto en el borde la piscina y que me lanzo en el lago de los botes rojos como si no fuera la primera vez en la que por flotador me sostienen mis hombros.
Cántame alma, sin penas y abrázame, ármame y lléname de vida, dame gracia, dame dicha y llena de sentido este camino sediento de aventuras fallidas. Grítale que tengo hambre y que quiero tomar el primer bocado entre mis manos, saborearlo y vanagloriarme de ser un ser más que lo ha logrado. Ayúdame a encontrarle sentido a éste rompecabezas descabellado y a darle vuelta a las piezas para armarlo con otros pedazos. No me digas que sueñe y no me pidas que ame, tómame para que luego me suelte y te demuestre que no soy cobarde, no me expongas ante el peligro pero déjame de él zafarme, quiero vivir una vida más allá de las pinturas mate.
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Entre puntos y comas
PoesiaA través de las palabras, "Entre puntos y comas" hace un recorrido en el tiempo, mediante la recopilación de escritos que solía anotar en una vieja libreta cuando la musa me tomaba por sorpresa y que actualmente siguen en constante expansión.
