Capitulo 6

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Tim despertó en cuanto el sol le dio en la cara. Pestañeo, con la vista borrosa y miro al techo de su cuarto. Todo parecía normal, lo mismo de siempre.

¿Había sido todo un sueño?

El cerro sus ojos y pensó.

Su primer beso.

Su primera vez.

Tomar a su madre en cada posición que pudo pensar.

Sentir cada parte de su cuerpo.

El miro debajo de su sabana y vio una muy familiar tienda de campaña en sus boxers.

Todo había sido real.

Y no necesitaba terminar ayer. Mientras el tuviera la pistola de control mental, él podía hacerlo siempre que quisiera.

Todas las cadenas de moralidad y ética que una vez sintió parecían haberse roto, despedazado.

Su mente se aceleró con posibilidades de las cosas que podía hacerle a su madre. Él podía comprar algunos dildos y otros juguetes sexuales. Él podía intentar hacer lo que vio en un video, poner crema batida y helado y cerezas sobre todo su cuerpo y comérselo de su piel desnuda, el postre definitivo. Conseguirle algo de lencería sexy y hacer que modele para él.

Él se levantó, se estiro, y luego bajo las escaleras. Él podía oler el café fresco y pan tostado. Su mama estaba en la estufa, vestida con una bata de baño, usando una playera y un par de pants. Muy lejos del camisón y las bragas que se puso para él.

Debería hacer que vista así para mi todo el tiempo cuando solo estemos nosotros dos en casa, pensó Tim.

"Buenos días, cariño," dijo Mama. "Dormiste bien? Estoy haciendo huevos estrellados. ¿Quieres?"

"Buenos días, Mama. Claro, huevos estrellados suena bien," el estómago de Tim gruño. Él había despertado su apetito ayer. "¿Quizás algo de café, también?"

"Por supuesto."

Tim miro a su madre preparar el desayuno, y se la imagino desnuda, usando solo un mandil, como en esos videos hentai japoneses que veía. El trago saliva, y su cara se enrojeció.

"Aquí tienes," dijo Mama mientras le daba su plato.

"Gracias, Mama." Tim tomo un tenedor y empezó a comer.

Luego pensó en algo.

"Por cierto, Mama, ¿a qué hora tienes que recoger a Heather hoy?"

"Heather? Oh, me envió un mensaje esta mañana, déjame revisar," dijo Mama, tomando su teléfono de la mesa de la cocina. "Hmm, quiere que la recoja un poco después de las doce."

Tim miro el reloj en la pared de la cocina. Ya eran casi las nueve de la mañana. A él solo le quedaban tres horas, a lo mucho.

"Por qué preguntas?" preguntó Mama curiosa, mientras mordía su pan tostado. "Quieres que te lleve al centro comercial hoy?"

"No, no, nada de eso," sonrió Tim. "Pero quería pedirte un favor. ¿Ya te duchaste?"

Mama lo miro, moviendo su cabeza con curiosidad.

*                                 *                                                         *

Tan pronto como entraron al baño, Tim prácticamente le arranco la bata, playera, y pants a su madre. Su boxers se cayeron unos pocos momentos después.

"Tienes...ahhh...mucha energía," balbuceo Mama. "Ciertamente...mmm...no planeaba pasar mi fin de semana así..."

"Lo siento, Mama," dijo Tim fervientemente. "Tienes...un increíble cuerpo... No puedo... No puedo quitar mis manos...eres...tan sexy..." La beso en la mejilla, en su cuello.

El Objeto DesconocidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora