Uno solo

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Yibo sentía la piel de Zhan debajo suyo, era cálida y suave, Zhan temblaba, sin mover sus manos en absoluto de su espalda, abrazados, Yibo estaba más que listo para el siguiente paso, pero temía asustar a su prometido, comenzó a moverse lento, dejando que sus miembros se rozaran un poco, Zhan ahogó un gemido en su mano, Yibo le quitó la mano pues temía se hiciera daño si llegara a morderla. Le dió un beso largo mientras seguía moviendo su pelvis con calma. Zhan se dejó llevar por el beso, comenzando a moverse también poco a poco debajo de su amado.

La sensación era buena, sentía su cuerpo caliente pero relajado, Yibo se recargaba en un brazo para no aplastar por completo el cuerpo de su amado, mientras lo seguía besando Yibo extendió la mano hasta la mesa de noche donde encontró lo que había preparado, un frasco de lubricante y un par de condones, no se arriesgaría a dejar a Zhan embarazado en la primera noche, sus suegros seguro si que lo mataban esa vez.

Zhan sintió los labios de Yibo abandonar los suyo, los siguió, incorporándose un poco, lo suficiente para ver lo que Yibo ahora tenía en sus manos, volvió a tensarse al ver el frasco de lubricante.

-Tranquilo Zhan... Está bien... Tranquilo...

Yibo le beso la frente, párpados y mejillas, mientras hábilmente abría el lubricante con una mano, y con la otra tomaba el miembro de Zhan, el cual de inmediato se puso a la defensiva empujando el pecho de Yibo con sus manos temblando.

-Sere gentil Zhan... Déjame hacerlo...-

Zhan asíntio tratando de relajarse, Yibo busco una almohada y la puso debajo de la cadera de Zhan, mientras aplicaba el líquido entre las piernas de Zhan que por inercia al sentir el líquido frío cerro sus piernas. Yibo sonrió ante la timidez de Zhan. Yibo no se inmutó y espero paciente a qué Zhan volviera a abrir un poco sus piernas, comenzó a frotar su dedo con lubricante en la pequeña entrada de Zhan, hasta que logro aflojar lo suficiente para que su dedo entrase. Sabía que tenía que ser paciente en la primera vez con Zhan, pero mentiría si dijera que no estaba por volverse loco. Tenía el cuerpo desnudo de Zhan a su disposición, el joven temblaba ante cada toque y pequeños suspiros escapaban de su boca, era demasiado sexy para resistirlo, le dolía ya la entrepierna de solo mirarlo, moría por entrar hasta lo más profundo de Zhan, ser uno solo, y escucharlo gritar su nombre. Su dedo exploró el estrecho espacio logrando que Zhan gimiera un poco, un segundo dedo logro entrar haciendo a Zhan arquear la espalda por el dolor e incomodidad.

Para lograr que se relajara Yibo comenzó a masturbarlo, no avanzo mucho antes de que Zhan lo detuviera.

-No... Es vergonzoso... No lo hagas... Por favor... - suplico el delgado chico, tratando de detener la mano que subía y bajaba en su miembro, Yibo sonrió malicioso, logrando que Zhan se erizará de pies a cabeza.

-Yibo...

Su mente se desconecto, Yibo bajo a la altura del miembro de Zhan y sin consideración alguna lo metió por completo en su boca, Yibo jamás pensó en algo como eso, pero al ver la cara de Zhan simplemente no lo pudo evitar, ver a su amado cayendo en un estado de lujuria pura era lo mejor. Se veía tan lindo rojo de pies a cabeza, temblando sin poder respirar adecuadamente, un tercer dedo se introdujo en Zhan y esta vez fue mucho más fácil, Yibo siguió con su trabajo de dar placer a su pareja, moviendo sus dedos a la par de su boca. Sin mas soltó el miembro logrando un pequeño gruñido de insatisfacción por parte de su amado, volvió a subir hasta la altura de su cara dónde dejo un ligero beso sobre la nariz de Zhan

-Ya no aguanto Zhan... Entraré...

-Si... Está... Está bien...

Yibo saco sus dedos, Zhan no sabía exactamente que debía hacer o esperar, Yibo lo había hecho sentir tan bien, no sabía que hacer para que se sintiera bien, su mente vagaba entre la razón y el placer, beso a Yibo sintiendo que algo caliente y duro golpeaba ese lugar donde Yibo había hecho un desastre. Poco a poco la carne caliente fue abriendo su paredes, sintiendo su cuerpo abrirse solo atino a aferrar lo que tenía más cerca, los brazos de Yibo, logrando dejar marcas en sus brazos, mientras arqueaba la espalda y hechabs la cabeza hacia atrás tratando de soportarlo.Yibo sintió algo de dolor cuando Zhan sin consideración clavó sus uñas en sus brazos, pero fue nada comparado a la estrechez y calor que lo rodeaban, se sentía tan bien que no quería parar, se le dificultaba respirar. Anri le había dicho que era mejor hacerlo entrar al fondo de una sola vez, para que no doliera mucho, "como arrancar una bandita adhesiva"

Pero ahora que estaba dentro de Zhan, temía lastimarlo, podía ver el miembro de Zhan erguido, goteante, en medio de ambos abdomenes, ya no quería estar quieto, con cuidado salió un poco de Zhan el cual se sintió un poco aliviado, dejando de aferrar los brazos de Yibo. Lo cual permitió a su novio alejarse un poco, pero volvió a entrar sin consideración, solo que esta vez Zhan no alcanzo a sostener lo brazos, solo las sábanas, comenzando a torcerlas, Yibo sentía lastima por la cara de dolor de su amado, pero si se detenían ahora podía ser peor, debía buscar bien el punto dulce de Zhan-zhan, teniendo todo el pecho y cuello de su amado a merced comenzó a dar pequeños besos que fueron volviéndose besos profundos buscando dejar marca en esa piel palida, volvió a salir y entrar aunque más lento esta vez, entrando hasta el fondo, logrando que Zhan soltase un pequeño gemido, lo había encontrado. Yibo tomo ambas piernas, levantando sobre sus hombros, eran tan blancas y delgadas, no resistió besar un poco y morder. Zhan que había mantenido los ojos cerrados por el dolor los abrió, solo para ver algo sumamente caliente. Su novio estaba ahí, besando su pierna derecha, veía su cabello humedecido por el sudor, sudor que goteaba lentamente por el abdomen perfectamente trabajado de su amado. Involuntariamente se mordió el labio, mando el dolor a otro lugar, solo quería estar con ese hombre y que todos se enteraran que ese caliente chico ya tenía a alguien que lo satisfacía. Sin más se empujó por cuenta propia hacía Yibo, el cual se sorprendió, pero sonrió, una sonrisa de medio lado que hizo a Zhan suspirar.

Yibo dejo que Zhan bajase sus piernas, Zhan abrió entonces sus brazos, sin decir nada Yibo llegó hasta esos labios dulces. Abrazados comenzaron a moverse, lento, entre besos cada vez más rápido. Hasta que estar abrazados ya no funcionaba,Yibo se incorporó un poco para tomar la delgada cintura de Zhan, logrado así que las embestidas fueran más fáciles. Zhan gemia y temblaba, sus manos se levantaban buscando a su amado. Tocando apenas sus brazos que seguían pegados a su cintura.

-Zhan... Yo... Ha..  joder...

Zhan nisiquiera podía hablar, su cuerpo se sentía a punto de estallar, Yibo comenzaba a embestir más y más rápido, llegando más profundo y lo extraño era que Zhan quería que fuera aún más adentro. Una estocada más y Zhan se libero en medio de ambos, antes de que Yibo hiciera lo propio. Zhan respiraba con dificultad, tratando de recobrar el aire, más fue inútil, apenas volvió a respirar su cuerpo fue girado sobre la cama. Yibo volvía a entrar, Zhan se quedó quieto un segundo procesando lo que pasaba hasta que su pecho fue sujetado con fuerza por Yibo para hacerlo poner de rodillas y entonces entrar hasta lo más profundo de Zhan, el cual solo atino a gritar.

-Aun no acabamos amor...- le susurro Yibo al oído, pero Zhan y no escuchaba nada, solo sentir las manos calientes de Yibo en su cuerpo ya lo estaba enloqueciendo. Giró la cabeza para besar a Yibo, la noche era larga, incluso olvidó la fiestas con sus amigos quienes tenían ya bastante rato sintiéndose extraños pues el festejado jamás llegó a la fiesta.

Fíjate en míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora